En condiciones normales -las actuales distan muchísimo de serlo-, el partido entre el Córdoba Futsal Patrimonio de la Humanidad y el Real Betis Futsal (sábado, 16.00 horas, Vista Alegre, Onda Mezquita y LaLiga Sports TV) hubiera sido una auténtica fiesta. Gradas repletas, aficiones empujando, jugadores con extra de estimulación por la grandeza del escenario... Todo será distinto. El graderío estará desierto y mudo. Todo el calor se concentrará en la pista, donde hay mucho en juego y alguna que otra cuenta pendiente. Y, además, con un aliciente extra: la presencia de los dos últimos fichajes extranjeros del Córdoba, los brasileños Caio César y Lucas Perin.

El duelo de rivalidad andaluza, que se ha convertido en un clásico en apenas un par de años gracias a la pujanza de ambas entidades -pese a la obvia diferencia de medios-, llega con los equipos inmersos en la lucha por un objetivo idéntico: afianzarse en la máxima categoría, en la que son novatos aunque no lo parezca. Los cordobesistas llegaron un curso antes, precisamente tras noquear en una histórica remontada de play off en San Pablo a los hispalenses; el Betis se ha estrenado en este curso extraño y tramposo. Ambos saben que no hay que descuidarse lo más mínimo porque lo que hoy parece aceptable, mañana puede ser insuficiente.

El partido tiene su trascendencia. Solo hay que echar un vistazo a la clasificación para entender hasta qué punto puede dañar un desliz. El conjunto cordobés, que suma 16 puntos en 14 partidos, encara el duelo situado en la posición décimoquinta, que le llevaría a jugar una eliminatoria por la permanencia. La percepción es engañosa. Ese puesto está condicionado por el hecho de tener tres partidos aún aplazados, aunque en el seno del club blanquiverde quieren despegarse cuanto antes de la parte baja. Por una cuestión de estética y de autoestima. El Betis, noveno con 20 puntos y dos partidos más, arrastra una racha de una victoria en los últimos cinco compromisos ligueros.

En el Córdoba hay hambre atrasada. La última vez que comparecieron ante sus seguidores -en cantidad mínima, que ahora se reduce a cero-, los blanquiverdes se llevaron un triunfo vital y rotundo ante O Parrulo (6-2), que les proporcionó un buen alivio en la tabla. Sin embargo, tras las suspensiones ante ElPozo Murcia y Jaén Paraíso -por casos de coronavirus en los rivales-, y la derrota en el pabellón Virgen de la Cabeza de Valdepeñas (7-4), se que han quedado en un lugar deslucido.

Josan González, entrenador del Córdoba, ha resaltado la "gran dificultad" que entraña la visita de un Betis que "es uno de los equipos que en esta primera vuelta ha hecho mejor los deberes". El técnico apostilla que "aunque sea un equipo recién ascendido, ya en Segunda División tenía una plantilla de Primera, con muchos jugadores expertos".

Los precedentes más recientes favorecen al Córdoba Futsal, que se impuso al Betis en las semifinales de la Copa Andalucía (3-2) para proclamarse posteriormente campeón y también en la Liga, venciendo en el pabellón Amate (1-2) con un gol en el último segundo de Pablo Del Moral.

El Córdoba Futsal no podrá contar para este partido con el cierre Cordero, con una lesión grado I en los isquiotibiales de su pierna izquierda. Sí tendrá Josan González a su disposición a los dos brasileños, que "podrán ayudar" pese a que aún se encuentran "adaptándose al equipo". El veterano cierre Caio César y el internacional sub-23 Lucas Perin se han ejercitado en los últimos días con sus nuevos compañeros y pueden tener su oportunidad. Sería en un partido de lo más especial, un Córdoba-Betis que nunca dejará de sorprender.