Manuel Alcántara, fallecido ayer miércoles a los 91 años, ha reunido una obra poética que le ha valido diversos galardones y también ha completado una prolífica carrera como articulista que ha engrosado hasta sus últimos días con casi 30.000 artículos publicados en prensa.

Nacido en la malagueña calle Agua el 10 de enero de 1928, cursó el Bachillerato en su ciudad y más tarde se trasladaría junto a su familia a Madrid. Comenzó la carrera de Derecho, que pronto abandonó por aburrimiento, trabajó en una empresa de seguros y se estrenó en el mundo de la cultura con participaciones en cafés literarios y la consecución de premios en juegos florales.

En 1955 publicó su primer libro de poesía, Manera de silencio, por el que recibió el Premio de Poesía Antonio Machado, y a este le siguieron Plaza Mayor, El embarcadero (1961), Ciudad de entonces (1962) -por el que obtuvo el Premio Nacional de Literatura José Antonio Primo de Rivera- y La mitad del tiempo (1963). Dos décadas después, en 1985, publicó el libro de poesía Este verano en Málaga, por el que fue premiado por el Instituto Hispano Árabe de Cultura, y sus siguientes libros fueron La misma canción (1992) y Cantigas de amigo (2003).

Colaboró en importantes revistas literarias y fue uno de los fundadores de la tertulia poética Versos a medianoche del Café Varela, en la que también participaron Mingote o Rafael Azcona.

Desembarcó en el mundo de la prensa en 1958 a través del semanario de estudiantes La Hora y fue redactor y luego columnista de importantes diarios y revistas: Juventud, Arriba, Marca -sobre boxeo-, Pueblo, La Hoja del Lunes y desde 1995 en Ya.

Desde la década de los 60 acumuló gran número de premios, la mayoría por su producción periodística, como el Luca de Tena 1965, por su artículo Pablo VI en Harlem; el Mariano de Cavia 1975, por su artículo Federico Muelas, o el González Ruano, por su texto Tono.

El Rincón de la Victoria le nombró hijo adoptivo en 1987, hijo predilecto de Málaga (1983), hijo predilecto de esta provincia (1999), Medalla de Andalucía (2000) o doctor honoris causa por la Universidad de Málaga (2000), además de poseer la Orden de Isabel la Católica.