Una excelente comedia de enredo con mucho humor

AUTOR Y DIRECCIÓN: Máximo Ortega

LUGAR: Sala Duque de Rivas

Lleno absoluto en la sala Duque de Rivas para asistir al estreno de El parecido, un nuevo texto de Máximo Ortega, con música de Nacho Fernández.Me apetece comenzar por el final: es notorio que el público sale de la sala con un excelente buen sabor de boca, algo que siempre es de agradecer después de una función. Ortega aborda en la trama las aventuras y desventuras del personaje central, Germán, que lleva años sobreviviendo a duras penas a costa de su parecido físico con Ricky Moretti, galán del que se ha convertido en doble oficial.

A partir de aquí se abre todo un abanico de posibilidades dramáticas en la trama de esta excelente comedia de enredo, que hilvana situaciones cargadas realmente de mucho y buen humor. Ni el tema ni su desarrollo rozan siquiera lo trascendental, tampoco le hace falta; El parecido es una función para ir a divertirse, a pasarlo bien, a reír, a desahogar todo lo acumulado durante el día, y realmente lo consigue.

¡Bienvenido sea el humor y bienhallada la risa! La complicidad entre director y actores se hace patente a través de la actuación gestual de todos ellos, que consiguen dar vida a los personajes que van desgranando diálogos ingeniosos y comentarios punzantes, convirtiendo a estos seres de carne y hueso en caricaturas que recuerdan al trabajo de la Comedia del Arte.

Tanto Auxi como Federico, Rafa, Esteban y Belén (por orden de aparición, no seamos malpensados) construyen de forma soberbia lo caricaturesco y estereotipado de estos personajes, que muestran todo un comportamiento exagerado, ese que el texto de Ortega requiere, precisamente. Una excelente comedia para pasar un rato agradabilísimo y olvidar por un momento la dura realidad del día a día. Un trabajo agotador de actores y actrices, que imprimen desde el primer momento un ritmo trepidante a la acción, que puede que decaiga un poco en la segunda escena, nada insalvable, ya que casi no da tiempo a percatarse de ello puesto que el ritmo se recupera enseguida. ¡Enhorabuena!