El arquitecto japonés Arata Isozaki, encargado de diseñar el Palau Sant Jordi de Barcelona, una de las joyas del proyecto olímpico de la capital catalana en 1992, ha ganado el Premio Pritzker 2019, el galardón de arquitectura más importante del mundo. El Palau Sant Jordi, principal activo del anillo olímpico de Montjuïc, fue concebido por el japonés como un espacio adaptable a varios acontecimientos.

Desde su inauguración en 1990, el pabellón ha acogido, además de conciertos, grandes eventos deportivos. El recinto ha sido la sede de dos Mundiales de natación, así como mundiales de atletismo, fútbol sala y de balonmano.