El subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, aseguró ayer que no le preocupa que pidan su dimisión por el acto de la jura de bandera en Dos Torres, pero sí en cambio «las acusaciones generales que se han hecho estos días, porque son una mentira y una barbaridad». Primo Jurado explicó que todos los que estuvieron invitados en el acto vieron lo que hubo allí, «una jura de bandera de civiles perfectamente reglamentada y un hermanamiento entre los vecinos de Dos Torres y los pueblos cercanos con las Fuerzas Armadas españolas». A su juicio, fue un acto «festivo, hermoso y plenamente constitucional», en el que en el momento del «reglamentario» homenaje a los caídos «se escogió una cruz que hay en la pared de la iglesia, a la que en los años 80 se le había retirado toda la simbología política, franquista, y quedó como una cruz para la paz y la convivencia». De hecho, añadió, «cuando en el año 2010 la Junta de Andalucía declaró bien de interés cultural (BIC) la parroquia de Dos Torres no puso ningún reparo a esa cruz, que es como las miles que hay en parroquias de toda España». Por todo ello, insistió en que es una «barbaridad que a estas alturas se cuestione el talante constitucional y las convicciones democráticas de las Fuerzas Armadas», que «podrían dar lecciones de entrega a los españoles y de convicciones democráticas a muchos de los acusadores», manifestó. Asimismo, tachó de «barbaridad cuestionar el sentido democrático de los vecinos de Dos Torres y su alcalde»