Un total de 200 fichas se incluyen en la Carta Arqueológica de Palma del Río, un documento que organiza y clasifica los elementos del patrimonio. En este caso, incluye 27 inmuebles en el patrimonio histórico urbano, 18 paneles de azulejería -también en el casco urbano-, 5 fuentes urbanas y 27 rurales, 17 cortijos y yacimientos arqueológicos en el medio rural, que supera el centenar de localizaciones. Estos 200 expedientes se catalogan por su periodo histórico, desde la prehistoria a la época contemporánea; por la tipología, ya sea funerario, habital, religioso, fortificación, productivo industrial; también por su grado de protección, estado de conservación o intervención arqueológica.
Con el objetivo de proteger los elementos patrimoniales, la Carta Arqueológica de Palma debe incluirse en el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico y el Plan General de Ordenación Urbana. Asimismo, se deriva a la base de datos de patrimonio inmueble del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía. La concejala de Cultura, Ana Belén Corredera, indica que Palma es el cuarto municipio de Córdoba en tener este documento que nace «desde la responsabilidad de conocer y transmitir las señas de identidad culturales de Palma y su protección».
El documento ya cuenta con la aprobación del Pleno, aunque desde Cambiemos Palma, su portavoz, Valle Alfaro, indica que faltan yacimientos arqueológicos.
La conservadora del Museo Municipal, Reyes Lopera, subraya la inclusión de aljibes, fuentes emblemáticas y otros elementos singulares como el Humilladero de Santa Ana, el Arco de la Purísima, azulejeria, los pagos de huerta, el Molino de Barrios, el Silo o la Electro-Harinera.
