Doce alumnas de cuarto curso del Centro Magisterio Sagrado Corazón, por iniciativa de la Asociación Española contra el Cáncer en Córdoba (AECC), y con la ayuda de sus profesores María Carmen García de Viguera y Rafael Carlos Benito Martínez, han estado durante mes y medio decorando las paredes del servicio de Medicina Nuclear del hospital Reina Sofía, dependencias que se han llenado de color y de más vida gracias a este trabajo artístico.

La idea de llenar estas paredes de ilustraciones, en concreto de escenas de El Libro de la Selva y de El Rey León, según la profesora Carmen García, partió de la AECC, actuando como mediadora Isabel Hidalgo, antigua alumna del Sagrado Corazón y vínculada a la junta directiva de la Asociación Española contra el Cáncer. Hidalgo trasladó al Centro de Magisterio Sagrado Corazón la propuesta de la AECC para que esta escuela universitaria colaborase con esta asociación en la materialización del proyecto.

La dirección del Sagrado Corazón aprobó formar parte de la actividad, que contaba con el visto bueno del Reina Sofía, y se decidió que el trabajo formara parte de la asignatura Desarrollo de Habilidades Artísticas. Además, para la realización de la decoración se ha contado con el apoyo de la pintora Marina Caracuel.

En concreto, las alumnas participantes en este trabajo fueron Ana Ramírez, Maribel Flores, Claudia Bustos, Gema Requena, María García, María Carmen Bermudo, Sara Mulero, Pilar de Burgos, Pilar del Río, Nuria Arévalo, María Gallego y Ana Galán. María Carmen García resalta que «la experiencia ha sido extraordinaria. Ha supuesto y antes y un después para nosotros, ya que ha servido para que las alumnas conozcan mejor la labor de la AECC y su faceta humana, y creo que ha sido muy bien recibida por profesionales y pacientes, sobre todo por los niños que acuden al servicio de Medicina Nuclear».

Detalle de como ha quedado una de las paredes del Servicio de Medicina Nuclear.

Por su parte, la responsable de voluntariado hospitalario de la AECC en el Materno Infantil del Reina Sofía, María Ángeles Pérez Baena, recalca que la decoración que han realizado estas alumnas aporta «alegría y color» al servicio de Medicina Nuclear, con detalles como los existentes en la sala de yodo radiactivo, con un paisaje que anima a quienes, debido a los tratamientos, tienen que pasar en este espacio 24 horas en aislamiento.

Además, fruto de este trabajo se ha firmado un convenio de colaboración entre la AECC y el Sagrado Corazón. Pérez avanza que, tras haberse realizado este proyecto, el próximo paso es decorar la consulta de cuidados paliativos pediátricos, que está en la segunda planta del Materno Infantil, o la sala de espera de la Unidad de Tratamiento Ambulatorio (UTA), aunque esto será a más adelante cuando se efectúe su reforma.

Por otro lado, María Ángeles Perez destaca que la sala de espera de Medicina Nuclear se ha decorado y completado con mobiliario, donado por la junta local de la AECC de Rute.

Mobiliario donado por la junta local de la AECC de Rute para la sala de espera de los niños.