Urbanismo aprobó ayer la concesión de la licencia de actividad y obra para la ampliación del edificio que posee El Corte Inglés en la calle Jesús y María, un documento que viene fechado en 2008 y que supone el último trámite urbanístico previo a que la firma de Isidoro Alvarez meta las máquinas en el terreno. Se trata de una actuación de peso que cuenta con un presupuesto de más de cinco millones de euros --el Ayuntamiento lo valora en ocho-- y que viene precedida por un rosario de obstáculos y procedimientos burocráticos que han hecho, unido a la crisis económica, que el céntrico establecimiento cuelgue el cartel de cerrado.
El proyecto de obra presentado en la Gerencia contempla actuar en el inmueble del antiguo Simago y en el del Palacio del Cine. En total, son 14.668 metros cuadrados de superficie. Según consta en la memoria, se procederá a la demolición total del edificio en suelo-rasante y quedará una planta sótano, planta baja y cuatro plantas más en altura. En el sótano se ubicará el supermercado-alimentación y en la baja la llamada venta personalizada y un rincón de restauración. Ya en el primero, segundo, tercero y cuarto nivel también se prevé la venta personalizada.
La citada memoria apunta a tres puntos de acceso. El principal estaría localizado en la calle Jesús y María mientras que los dos otros serían por las calles Duque de Hornachuelos (puerta del Palacio del Cine) y Juan de Mena (puerta trasera de Simago).
El principal escollo al que tuvo que hacer frente El Corte Inglés fue el dictamen negativo emitido por la Comisión Provincial de Patrimonio de la Junta de Andalucía en 2006, un varapalo basado en el aumento de la edificabilidad y el incremento del volumen que planteaba la empresa en el centro comercial proyectado. Entonces, la firma proponía un aumento de altura muy significativo, sobre todo en el edificio de Jesús y María, que fijaba cinco plantas y 19,60 metros asomando así más de seis metros sobre los inmuebles próximos. Esta intención chocó con las directrices de la Delegación de Cultura. Cuando se cambió el proyecto, cambiaron las consideraciones, y en 2007 la Gerencia de Urbanismo aprobó definitivamente la reforma.
Mientras se han solventado todos los trámites, El Corte Inglés ha abierto el Hipercor Ronda de Córdoba y ha invertido cuatro millones de euros en la recuperación del Teatro Góngora, condición ésta fijada como contraprestación de la empresa.
