El Servicio Municipal de Consumo (SMC) del Ayuntamiento de Córdoba viene desarrollando desde principios de este mes una campaña informativa sobre consumo responsable en la que, entre otros aspectos, ofrece información y consejos sobre cómo afectan los hábitos de consumo al calentamiento del planeta y a la contaminación de la ciudad, entre otros temas, aspectos que no son habituales en campañas de este tipo.

Para ello se han impreso 85.000 completos trípticos en los que no solo se alerta sobre las consecuencias del cambio climático, sus causas y posibles soluciones a nivel general, sino que se detallan las consecuencias para la capital cordobesa, como el aumento de la temperatura en verano, el hecho de que lloverá menos veces y menos cantidad, y que el otoño y la primavera serán más cortos y el verano e invierno más largos. «Todo ello con más meses más cálidos y secos, como está ocurriendo ya, y con más riesgo de incendios forestales (en la zona de la sierra) y descenso del turismo en verano por las altas temperaturas», según señala este tríptico, que además de estar disponible en diversas dependencias municipales, se ha buzoneado en buena parte de la ciudad.

En el marco de esta campaña, desde el SMC se apunta que la buena salud de los vecinos de Córdoba depende de la estabilidad de los sistemas ecológicos y físicos de la biosfera. «Hoy, al vivir en la ciudad, pasamos por alto que dependemos de los sistemas naturales, que bajo presión sustentan un número cada vez mayor de personas», afirman desde este servicio municipal.

A la hora de definir los objetivos y contenidos de esta campaña se ha tenido en cuenta que la opinión pública ha construido la idea de un cambio climático rodeado de imágenes de catástrofes naturales, de problemas lejanos, donde se muestran «más las consecuencias y no las causas ni las soluciones, no mostrando el riesgo real que supone que el clima cambie como consecuencia del calentamiento global».

En esta idea algo distorsionada de la realidad, las personas son presentadas como espectadores o víctimas, pero no como responsables de estos cambios, «ni como la solución a los mismos mediante la modificación de sus hábitos o estilos de vida», según se indica desde este servicio municipal.

En esta línea, el tríptico recuerda, entre otros datos, que en Córdoba viven más de 328.700 personas, y todas consumen productos y servicios necesarios, «pero también muchos que no lo son tanto» y que consumen mucha electricidad. Electricidad cuyo uso no contamina de por sí, pero sí su producción, ya que el 20% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero generadas en España proviene de la producción eléctrica.

Por otro lado, la campaña también viene a intentar minimizar cierto desconocimiento general sobre el impacto de la conducta de consumo no solo sobre la salud o economía individual, sino sobre el medio ambiente.

CONSULTAS CIUDADANAS

Según el SMC, este hecho se manifiesta diariamente en la atención presencial de consultas que atiende este servicio, o en los talleres de consumo responsable que se vienen impartiendo en los centros educativos de la capital, donde la mayoría de los ciudadanos desconocen muchas cuestiones sobre el ciclo de vida de los productos que adquieren y sobre el impacto de su uso en el calentamiento del planeta, y el consecuente cambio en el clima, la pérdida de biodiversidad y el agotamiento de los recursos naturales.

Así, en el citado folleto se hacen frecuentes referencias sobre el consumo y su relación con el entorno cercano -en cuestiones como alimentación, deporte y transportes- porque «para revertir o mitigar el cambio climático mediante la mejora de los estilos de vida hay que abordar los cambios de conducta desde la esfera de lo personal, es decir, desde la salud y la economía propia, la de la familia y la ciudad que se habita».

En definitiva, una novedosa campaña de consumo que también pretende provocar una reflexión que conlleve la promoción de cambios en la conducta de los cordobeses hacia un consumo más consciente, responsable y respetuoso con el medio ambiente ante los cambios del clima que se avecinan.