El Gobierno hizo ayer un llamamiento al PP y a Ciudadanos para que en Andalucía haya un gobierno «constitucionalista» y para que no pacten con Vox y eviten así que esta comunidad se convierta en «cuna de la ultraderecha» en España, porque esa es -ha dicho- la «prioridad» de los socialistas. Así lo apuntó la portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá, quien consideró que los comicios andaluces tuvieron un «claro vencedor», que fue el Partido Socialista, y señaló que Susana Díaz está «legitimada para defender la Presidencia» de la Junta. Por contra, consideró «difícil de entender» y sorprendente «que PP o Cs se arroguen el derecho a gobernar la Junta».

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Celaá recalcó que hay que conseguir en Andalucía un gobierno «constitucionalista» para evitar que avancen las propuestas de extrema derecha en la región, que «amenazan la calidad democrática» y suponen un «retroceso» en materia social y de libertades. La también ministra de Educación y Formación Profesional admitió que la irrupción de Vox ha sido una «sorpresa» en estas elecciones, pero advirtió de que la sorpresa sería aún mayor si PP o Cs «pretendieran buscar su apoyo» para acceder al Gobierno andaluz.

«Hemos sido el último país de Europa en sufrir el impacto de la extrema derecha pero podemos ser el primero en ver cómo los partidos de la derecha son capaces de apoyarse en la ultraderecha, por más que suponga blanquearlos», señaló Celaá, quien aclaró que lo decía «con todo respeto a todos los votantes de Vox». Insistió la portavoz del gobierno en que «la democracia tiene que vencer el miedo» y que en Andalucía se tiene que promover un gobierno «constitucionalista y europeísta», porque la irrupción de la extrema derecha y sus propuestas son una «clara amenaza» para la calidad democrática española. También aseguró que los socialistas tienen como «prioridad» buscar «una solución a la gobernabilidad de Andalucía» y evitar que esta comunidad se convierta en «la cuna de la ultraderecha». «Vox está en las instituciones ya porque así lo han querido sus votantes; ahora hay que tomar una determinación para configurar lo que es el Gobierno de la Junta de Andalucía», concluyó.

Para Celáa, la entrada de Vox en el Parlamento andaluz es un «reflejo más» de nuestro «estar en Europa», porque España era el único país con esa «anomalía positiva» en la que la ultraderecha no tenía representación. En cualquier caso, admitió que si Vox es o no anticonstitucional es algo que solo puede determinar el Tribunal Constitucional.