Durante más de mes y medio, desde mediados o finales de noviembre hasta la primera semana de enero, muchos cordobeses han comido y bebido más de lo que debieran debido a la cada vez mayor proliferación de comidas con amigos, compañeros de trabajo y familiares con la excusa de la Navidad, celebración que cada día se adelanta más. «Y estos excesos continuados provocan que el organismo se llene de toxinas y se incremente la sensación de pesadez, debido a que la dieta de la que se ha venido abusando no ha sido equilibrada ni se ha distribuido en cinco comidas al día, sino que durante demasiados días se ha ingerido en estas comilonas más grasas, alcohol y azúcares de lo recomendable y apenas ha habido verduras y frutas», recuerda la doctora Estrella Castro, directora de la unidad de gestión clínica Occidente de Córdoba. «Para tratar de revertir esta situación y que nuestro organismo vuelva a sentirse bien, la solución no es iniciar dietas agresivas, a base de solo proteínas o hidratos de carbono, que están tan de moda, ni a base de cualquier tipo de bebida o de ayuno, ya que lo único recomendable es realizar una dieta equilibrada, con 5 comidas al día, en la que estén presentes las verduras y las frutas, pero también la carne, el pescado, los huevos, las legumbres, los cereales, en resumen, los alimentos básicos de la dieta mediterránea pero en raciones proporcionadas, y también beber un mínimo de litro y medio o dos de agua al día, pues con las comilonas en muchas ocasiones se olvida beber agua, que es básica», explica esta médica de familia.

Estrella Castro resalta que «no pasa nada por disfrutar de una o dos grandes comidas mensuales por distintos motivos y que sirva como una especie de premio por seguir una dieta equilibrada, en la que se tomen solo las calorías necesarias y acordes al peso o edad, pero en las fechas navideñas cada vez se incrementan más los días en los que se pueden ingerir hasta el doble de las calorías y esos kilos de más, al margen de que pueden provocar problemas de salud, si no se pierden se pueden ir sumando, ya que a lo largo del año son cada vez más las celebraciones que existen». Esta médica de familia recalca que la vuelta a la normalidad alimenticia tras las fiestas navideñas debe ir acompañada también de ejercicio físico más o menos intenso, acorde a lo que pueda llevar a cabo cada persona. También es importante el descanso, después de muchos días de trasnochar y a lo mejor no dormir lo suficiente, ya que, según esta doctora, cuando se descansa poco se alteran las hormonas que regulan el apetito y existen más ganas de comer. Castro señala que son cada vez más los cordobeses que se animan a consultar con su médico de cabecera cómo pueden bajar de peso y añade que «los facultativos, junto con los profesionales de enfermería, podemos indicar unos correctos hábitos alimenticios que ayuden a rebajar peso y a sentirse mejor, adaptados a cada persona y problema de salud».