El informe del arqueólogo provincial de la delegación territorial de Cultura de la Junta de Andalucía sobre el ara de Bacauda, que ya ha sido remitido al Ayuntamiento y al que ha tenido acceso La Crónica de Cabra, propone que «esta importante pieza arqueológica sea examinada por un técnico cualificado en restauración para establecer las patologías existentes y elabore una propuesta de limpieza y consolidación de la misma».

Según el informe, tras el desmonte de la mesa de altar de la iglesia de San Juan Bautista del Cerro el pasado 22 de agosto y la extracción de dicha pieza arqueológica de la misma, «en un primer examen de la pieza se observa que solo ha sido objeto de una afección relativamente reciente en la parte superior, según el párroco José Antonio Jiménez Cabello, para la limpieza de chicles, quemaduras de cigarros y garabatos hechos con rotulador».

Añade que también «se pudo observar que toda esa superficie superior estaba impregnada de silicona, tal vez del momento en que la inscripción fue reubicada como altar y protegida por una urna de metacrilato sin ventilación alguna, circunstancia que, tal vez, podría dar lugar a la aparición de microorganismos».

Siempre según el informe de Cultura, «la rotura que se observa en su parte central no es reciente, según puede deducirse de fotografías antiguas que hemos recuperado, afectando a toda la pieza y, aunque se mueven levemente las dos partes, parece que están unidas con algún tipo de perno cuyo material desconocemos y, por tanto, si puede afectar de alguna forma en el futuro a la integridad de la misma».

Esta pieza arqueológica regresó el pasado 11 de septiembre a la iglesia de San Juan Bautista de Cabra, tras ser depositada el 22 de agosto en los almacenes del Museo Arqueológico Municipal para ser estudiada por personal especializado en restauración y conservación de la Consejería de Cultura y Patrimonio de la Junta de Andalucía.