Un grupo de familiares, vecinos y amigos de Francisco Aguilar, fallecido el pasado 1 de marzo, le han rendido un homenaje abriendo las puertas de su casa, desde donde solía saludar a todos los vecinos y donde él tenía la tradición de no quitarse el abrigo hasta que no llegara el «40 de mayo». Con este encuentro, celebrado el pasado sábado, 9 de junio, se pretende institucionalizar una celebración para recordar a un hombre amable, amigo de todo el pueblo, que se caracterizaba por su torrente de voz y el saludo a todo el que pasaba por su puerta. Además fue cofundador de la hermandad de San Juan y en su casa él organizaba cada mañana del Viernes Santo, en el Encuentro, una degustación de dulces típicos y licores para romanos, costaleros y nazarenos.