La subida del Impuesto de Matriculación queda congelada. Desde el pasado 1 de enero, cuando entró en vigor el nuevo protocolo de homologación de emisiones WLTP, más riguroso que el anterior NEDC, muchos coches saltaron de tramo impositivo del gravamen al verse incrementadas sus emisiones medias. Este hecho provocó que muchos coches que en 2020 quedaban exentos del impuesto, en 2021 se encarecieran un 4,75%. Desde el sector reclamaron a finales de año una congelación de este impuesto que nunca se llegó a producir, alegando que, como ha sucedido, las ventas de coches y la demanda se iban a resentir.

Finalmente, los partidos de la oposición han conseguido congelar este impuesto mediante una enmienda impulsada por el PDeCat contra la nueva Ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. El PP, Vox, Esquerra Republicana, Ciudadanos y el PRC se han alineado a favor del PDeCat, superando a los votos en contra del PSOE y Unidas Podemos. El PNV se ha abstenido.

Mismo cargo que en 2020

Según la nueva propuesta, que será remitida al Senado para su aprobación definitiva, todos los coches mantendrán el mismo tramo impositivo al que pertenecían en 2020 independientemente de las emisiones declaradas según la normativa WLTP, cuyos resultados son un 20% más elevados aproximadamente que aplicando el protocolo de homologación NEDC.

Según marca el Impuesto de Matriculación, los vehículos que emiten entre 120 y 160 gramos de CO2 por kilómetro deben pagar un 4,75%, mientras los que emiten entre 161 y 200 gramos pagan un 9,75% y los que emiten más de 201 gramos pagan un 14,75%. Los que emiten menos de 120 gramos quedan exentos del pago. Bajo la nueva propuesta del PDeCat, los tramos quedan modificados, quedando libres de pago todos aquellos coches que emitan menos de 144 gramos y debiendo pagar un 4,75% los vehículos que emitan entre 145 y 192 gramos de CO2. Los tramos más elevados quedan entre los 193 y los 240 gramos de CO2 (9,75%) y por encima de los 241 gramos (14,75%).

Las reacciones del sector no se han hecho esperar. Desde la patronal de concesionarios, Ganvam, Raúl Palacios, su presidente, agradece que este paso, "si el Senado lo apoya también", "favorecerá al consumidor y contribuirá a reactivar la demanda en un momento en el que las matriculaciones en España se quedan casi un 40% por debajo de los niveles prepandemia". No obstante, Palacios insta a la administración a "poner en marcha una estrategia largoplacista para incentivar la movilidad sostenible" y defiende la "eliminación del Impuesto de Matriculación y la reorientación de la presión impositiva para que se base en las emisiones y la normativa Euro, que está asociada a la antigüedad del coche y permite medir NOx, azufre, partículas e hidrocarburos, que son las emisiones realmente contaminantes".