Las reacciones desde Córdoba a los resultados de los comicios autonómicos en Galicia y Euskadi giraron ayer en clave de política nacional, con preocupación por la fuerte reentrada en el Parlamento vasco de EH Bildu, su cercanía al ganador (el PNV) y lo que todo ello pueda significar para las relaciones de Euskadi con el resto del Estado.

GALICIA Respecto a Galicia, tanto el PP cordobés, por boca de su secretario, Adolfo Molina, como el coordinador de IU en Córdoba, Pedro García, se mostraban ayer pletóricos, por supuesto, por muy distintos motivos.

Por un lado, Adolfo Molina no ocultaba su satisfacción por el triunfo popular en Galicia, que para él demuestra "que hay mucha gente que confía en el PP y en su gestión", como la de Feijóo en los últimos años a base de "hacer unas políticas serias, de decir la verdad y de austeridad".

El responsable del PP, además, aprovechó para reflexionar sobre el descenso de los socialistas(PSG), afirmando que "la gente tiene memoria y sabe quiénes han sido los causantes en muy buena parte de la situación actual, aunque ahora se pongan detrás de la pancarta... Y ahí está el resultado".

Para el coordinador de IU en Córdoba, Pedro García, lo importante del caso gallego ha sido la "sorprendente, incluso para nosotros mismos" entrada de Alternativa Galega de Esquerda (AGE) en el Parlamento, una auténtica "alegría después de tantos años en los que no tenían voz nuestros compañeros, que lo han pasado muy mal". García, al igual que hizo por ayer por la mañana en Córdoba el coordinador de IU-CA, Diego Valderas, cree que el ascenso demuestra la fortaleza a nivel español de la formación de izquierdas, una subida "en la que algo tiene que ver Andalucía, por supuesto".

EUSKADI Distinta es la sensación que al PP y a IU de Córdoba le han dejado los resultados vascos. Para Adolfo Molina, "me preocupa" cómo EH Bildu ha festejado sus resultados a gritos de "independencia", justo "en un momento donde está en juego nuestra credibilidad como país, en el que deberíamos estar unidos y remando hacia el mismo lado". Menos inquieto se mostraba respecto a los múltiples intereses económicos y comerciales que unen a Córdoba con el País Vasco, ya que "yo entiendo también que hay gente muy seria en Esuskadi". Molina, por último, se felicitaba porque el descenso del PP en Euskadi no sea en votos, sino por la ley D'Hont debido a la irrupción de HB Bildu.

Por parte de IU, la pérdida del escaño para Ezker Batua Berdeak no es una buena noticia, aunque García destacaba anoche "la complejidad del escenario político vasco" y se mostraba partidario de que la victoria del PNV y el ascenso de EH Bildu "se sepan administrar con sensatez en todos los campos".

LA VISION ANDALUCISTA Por su parte, María José Ríder, nombrada ayer mismo secretaria provincial del Partido Andalucista, vio los resultados en clave andaluza, destacando la importancia de tener en la tierra un nacionalismo fuerte, señalando el caso de HB Bildu o el PNV con su enorme peso en el Parlamento Vasco y en las instituciones españolas, y eso solo con apenas 276.000 y 384.000 votos, respectivamente. "Son partidos determinantes en su tierra y en el resto de España. El problema es que el pueblo andaluz no se cree que es andaluz". Ríder mostró su sorpresa por el descenso del nacionalismo en Galicia (aunque lógico tras su escisión, puntualizó) y la subida del PP, que no ha acusado el desgaste de gobernar pese a la crisis.

EL PSOE Por su parte, el PSOE decidió que desde las secretarías provinciales no se realizaran declaraciones hasta hoy. Por esta razón, el secretario de los socialistas cordobeses, Juan Pablo Durán, declinó anoche hacer declaraciones al respecto.