Una de las dificultades añadidas con las que se va a topar la reparación y reinstalación de todo el cableado robado ayer es la del acuerdo de cesión de El Arcángel que tiene el Ayuntamiento con el Córdoba. El presidente blanquiverde lo sabía desde su llegada al cargo. De ahí que uno de los puntos a tratar en los contactos que ha tenido y debe seguir teniendo con Ocaña es la de fijar un marco para ese acuerdo que, actualmente, se encuentra en precario. Ello quiere decir que no existen normas ni cláusulas por escrito sobre las pautas que han de seguir el Ayuntamiento y el club en cuanto al uso, disfrute y mantenimiento del recinto.

Esta indefinición provocó que en el verano del 2007 hubiera una situación parecida. La celebración de un concierto en El Arcángel dejó destrozado el ya pobre césped del estadio. El club, siempre limitado económicamente, reclamó inúltimente algún tipo de ayuda y debió pagar el nuevo césped.