El Estadio Municipal de El Arcángel volvió a ser durante la madrugada de ayer el objetivo de los ladrones, que se llevaron tres kilómetros de cable eléctrico (unas cuatro toneladas de cobre) y dejaron sin suministro a la tribuna --en la que se encuentran las dos torretas de luz--, vestuarios, cabinas de prensa, lavandería y otras dependencias. Entre la 1.00 y las 4.00 de la madrugada, una banda formada presuntamente por ciudadanos de Europa del Este logró entrar en la instalación saltando por el muro existente entre la nueva preferencia y el antiguo fondo sur. Una vez dentro, quitaron los pestillos de la puerta del maratón y empujaron las dos hojas hasta forzar el cerrojo de la misma para que, supuestamente, entraran dos furgonetas, previamente sustraídas, para cargar el material robado.

Los cacos actuaron con diligencia y teniendo perfecto conocimiento de la instalación y de la manera de extraer el material. De hecho, de las 22 mangueras existentes seccionaron 20. Las dos que quedaron intactas fueron la de fibra óptica (solo lleva cristal) y la de alta tensión que, en caso de haber intentado manipularse, hubiera supuesto la muerte casi instantánea para el ladrón. De los cables sustraídos, la mitad tenían una sección de 240 milímetros y la otra mitad, de 150 milímetros. El cable de la primera medida llega a pesar dos kilos el metro lineal y el de la segunda, un kilo, por lo que los ladrones se llevaron un botín aproximado de cuatro toneladas de cobre, ya que la longitud de cada uno sobrepasaba los 140 metros.

Una pareja que se encontraba en su coche a las cuatro de la mañana dio el aviso de la salida de vehículos del estadio a la Policía Nacional que, al momento, pasó la información a la Comandancia de la Guardia Civil. Poco después, agentes de la Benemérita detectaron a los supuestos autores del robo a la altura de Montoro. Estos, al percatarse de la presencia de la Guardia Civil, abandonaron la furgoneta en la que viajaban, se dieron a la fuga y se subieron a un turismo que los acompañaba. En el vehículo abandonado quedó parte del material sustraido.

Avisada entonces la Comandancia de Jaén, varios agentes interceptaron el turismo a las 5.20 horas en el punto kilómetro 298 de la N-IV, a la altura de Bailén, procediéndose a la detención de sus cuatro ocupantes, ciudadanos de Europa del Este. Otra de las furgonetas que presuntamente fue utilizada en el robo fue localizada ya por la tarde en Arganda del Rey, sin encontrarse nada en su interior y sin que se produjeran detenciones.