Open Arms y World Central Kitchen preparan un corredor humanitario entre Chipre y Gaza

El barco Open Arms, en misión conjunta con World Central Kitchen, organización fundada por el chef José Andrés, se encuentra desde el viernes pasado atracado en el puerto de Lárnaca, Chipre, con toneladas de comida y agua a bordo con la idea de preparar un corredor humanitario hasta la Franja de Gaza.

El objetivo es ayudar a paliar la grave crisis humanitaria que sufre la población civil de este enclave. Se trata de una operación de alta complejidad, que hasta ahora no se ha logrado llevar a cabo, a pesar de que el Ministerio de Exteriores de Israel anunciaba el 20 de diciembre de 2023, la pronta apertura de un corredor humanitario marítimo para desde Chipre, que estaría sujeto a una “inspección de seguridad coordinada por Israel”.

La misión se divide en dos fases. La primera arrancó hace una semana, cuando el Open Arms, tras un bloqueo administrativo de 20 días en Crotona, (Italia) zarpaba, cargado de toneladas de comida y agua, rumbo a Chipre.

La segunda fase, mucho más compleja, está en marcha desde la llegada el pasado viernes del Open Arms a Lárnaca, Chipre, donde ambas organizaciones trabajan conjuntamente aportando estructura y recursos que puedan garantizar el desembarco de alimentos y enseres de primera necesidad para su posterior distribución al norte de Gaza, donde, según apunta la organización, la población sigue sin recibir comida ni agua debido a la dificultad que tienen los camiones en cruzar el territorio desde el paso de Rafah, al sir de la franja.

El objetivo de la misión es establecer una ruta de entrada de alimentos y material sanitario en la zona norte de Gaza con diferentes lugares de entrega en función de las necesidades, para garantizar una entrada constante de ayuda humanitaria.

Más de cuatro meses de conflicto armado han dejado ya más de 29.000 muertos, según las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por Hamás.

Con cientos de miles de personas desplazadas, la ONG hace hincapié en que la amenaza de hambruna está cada vez más presente, en un momento en que las vías de acceso por tierra para la entrada de ayuda humanitaria son insuficientes.

Open Arms ha abierto ya una vía de donaciones para financiar su plan de ayuda.