Entrevista

Dinesh Patnaik, embajador de India: “No tomamos partido en Ucrania como no lo hicimos en Irak o Siria”

El embajador del país más poblado del mundo habla de geopolítica, de la guerra de Ucrania y de la relación del gigante demográfico con España

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista.

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista. / José Luis Roca

Mario Saavedra

Naciones Unidas ha anunciado que India superará a China en número de habitantes el próximo mes de abril, en unas pocas semanas. Según algunos estudios, ya lo ha hecho. Tiene alrededor de 1.425 millones de habitantes, indica el World Population Review. Es la mayor democracia del mundo, pero sigue siendo un país muy pobre, con menos de 2.200 euros de PIB per cápita. EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, del grupo Prensa Ibérica, habla con el embajador de India en España, Dinesh Patnaik, del futuro del nuevo gigante demográfico, de su relación con España y de su encaje geopolítico en el nuevo mundo tras la guerra de Ucrania

Pregunta: Estoy hablando con el embajador del país más poblado de la tierra, o del que está a punto de serlo… ¿Tiene relevancia? ¿Es importante sobrepasar a China?

R: Hay dos formas de verlo. Por un lado, es una cosa muy buena ser el país más poblado, porque es también un país muy joven. Tenemos 1.000 millones de personas por debajo de los 35 años. Hablamos de un país que, durante los próximos 50 años, será el principal proveedor de cerebros, talento y potencial laboral del mundo. 

P: Ya da grandes ejecutivos, como el CEO de Apple…

R: El de Microsoft, Google, Starbucks, Chanel… Es gente con mucho talento y dominio del inglés que aprovecha sus oportunidades en el extranjero. Tener una enorme población genera muchas oportunidades, pero también retos. Uno es que, con tanta gente joven, es obligatorio tener un crecimiento económico apropiado para que esa ventaja demográfica dé dividendos. Por eso hemos trazado un plan para conseguir un crecimiento sostenido durante 25 años. India tiene 75 años de edad. La visión del primer ministro [Narendra Modi] es que cuando lleguemos a los 100 años tengamos un nivel de desarrollo alto, equitativo e inclusivo, en el que todos los indios se puedan beneficiar del alto crecimiento. 

P: Suena un poco como el camino chino hacia el crecimiento, pero ellos tienen un sistema diferente, no son una democracia y por tanto tienen menos restricciones. ¿Cómo van a competir ustedes?

R: No competimos con China. China ha crecido de una forma en la que nosotros no podemos crecer. Puede decidir desde arriba cómo distribuir sus recursos y decidir qué partes de la economía y que leyes sacar. Para nosotros es una cuestión más de abajo arriba. Es una forma más democrática de operar, aunque en ocasiones sea más lenta. Y más inclusiva: todo el mundo es parte de la toma de decisiones.

P: Tiene usted aquí un libro titulado “Religión, castas y política en India”. ¿El sistema de castas es un reto para el crecimiento económico?

R: No. Lo fue en los comienzos. Cuando comenzó el sistema de castas era una forma de distribuir el empleo. Con el paso de los años, las llamadas castas altas empezaron a tomar todo el control de la economía y del sistema. Pero durante estos 75 años hemos ido legislando para cambiar eso. Tenemos las mayores leyes discriminación positiva: puestos de trabajo reservados [para las castas bajas] para compensar la discriminación histórica. En estos 75 años, los de las llamadas castas bajas han emergido con fuerza, y ahora son políticamente muy relevantes. Hoy hay una distribución equitativa del poder político en el sistema. 

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista.

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista. / José Luis Roca

España e India

P: España tiene un enorme déficit comercial con India. Importamos 4.200 millones de euros y sólo exportamos 1.500. ¿Se le quejan sus contrapartes aquí?

R: No. Cuando quieren vender cosas en India, hacen proyectos de exportación, y por eso tenemos unas 250 empresas que están activas en India en proyectos de construcción, energía, infraestructuras, energía renovables…

P: Abertis, Gamesa, Inditex…

R: Las empresas españolas en India son más activas que las indias que vienen a España. Así que hay un equilibrio: sí, vendemos más cosas a España, pero España tiene más “acción” en India.

P: ¿Hay algún gran proyecto en marcha ahora mismo?

R: Cientos de ellos. El año pasado Ferrovial compró una empresa por 450 millones. Hay muchas farmacéuticas, como Suanpharma, comprando otras de India. Y químicas, textiles, comida congelada, informática…

P: Bangalore es como un Silicon Valley. ¿Alguna relación especial con las tecnológicas?

R: En India, la informática es ubicua. Bangalore es la que conoce todo el mundo, pero está Bombay, Chennai, Bhubaneshwar, Gurgaeon… España es muy activa en áreas especializadas, como los videojuegos y audiovisuales o gráficos generados por ordenador (CGI).

P: Usted lleva un año de embajador, ¿cuál es su impresión por el momento?

R: Conocía bien España y por eso quería venir, me encanta este lugar. Me sorprendió la diversidad. En India asumimos la diversidad como algo normal, tenemos 22 idiomas oficiales, y otras 126 no oficiales, además de 3.000 dialectos, cada uno con su caligrafía… y así con grupos étnicos y religiosos. Pero en España también hay mucha diversidad, de Galicia a las Baleares, de Cataluña a Canarias… Es muy diferente también. 

P: ¿Algo que no le haya gustado?

R: Me entristece que España, que es un país tan fuerte en tantos aspectos (14ª economía del mundo, uno de los países grandes de la UE en territorio, conexiones con América Latina), creo que no juega un papel en el mundo que se corresponda con su potencial. Históricamente ha sido un imperio: Elcano, Magallanes, Colón. Ahora, parece que España mira más hacia dentro que hacia fuera. Es el momento de que juegue un papel más importante en la agenda internacional. 

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista

Dinesh K. Patnaik, embajador de India en España, durante la entrevista / José Luis Roca

P: La comunidad india en España es relativamente pequeña.

R: 90.000 personas.

P: ¿Cómo se integran, cuáles son sus problemas?

R: No tienen problemas. Los indios trabajan duro, mandan a sus hijos al colegio, tienen altos niveles educativo, compran viviendas… Les va bien, mira en Estados Unidos. 

P: Pinta usted una foto muy de colores. ¿No tienen dificultades?

R: Los que vienen ilegalmente se quejan de la falta de asistencia. Nosotros les decimos que tenían que haber venido legalmente… El resto está bien integrado, habla español. 

P: ¿De qué habla con su contraparte en el Ministerio de Exteriores entonces?

R: Hay muchos asuntos, sobre todo relativo a la Unión Europea y a Naciones Unidas. Estamos negociando un acuerdo de libre comercio con la UE, y necesitamos el apoyo de España. También en temas del espacio. He hablado con [el expresidente, José Luis Rodríguez] Zapatero, con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ayer estuve con José María Aznar…

P: ¿De qué habló con Aznar, por ejemplo?

R: De las cosas que pasan en el mundo, de cómo ve España, de los asuntos internos españoles, de América Latina… India está creciendo mucho en América Latina, nuestro comercio se ha multiplicado allí por 15, y tenemos lazos culturales, especialmente en el Caribe. Hablamos también de qué ha pasado en el norte de África, y el cambio de posición de España con Marruecos, los problemas de la Unión Europea, el futuro del indo pacífico, qué pasa con China, Rusia…

India y la guerra en Ucrania

P: Hablemos de la posición India hacia la guerra de Ucrania. ¿Me equivoco si lo llamo ambigüedad estratégica?

R: No, no es ambigüedad. Eso significaría que no sabemos cuál es nuestra posición.

P: O que no quieren que la gente sepa cuál es.

R: Para nosotros está muy claro: no tomamos partido en los conflictos. En Irak, Siria, Libia o, antes de eso, en Corea o en las guerras de África, no nos ponemos de ningún lado. Nuestra condición ha sido siempre que ambas partes se sienten juntas para resolver los problemas, porque la guerra nunca es una solución. Como mi primer ministro dijo al presidente Putin: este no es el momento para una guerra; nunca lo es. Pero hemos enviado ayuda humanitaria y alimentos a Ucrania…

P: ¿Ahora lo están haciendo?

R: Desde que comenzó la guerra. La gente nos dice, ¿por qué no condenan la invasión? No condenamos, pero ayudamos. Hemos evacuado a más de 22.000 estudiantes que estudiaban en Ucrania, por ejemplo, que vinieron a India.

Entrevista al embajador de India en España, Dinesh K. Patnaik.

Entrevista al embajador de India en España, Dinesh K. Patnaik. / José Luis Roca

P: Pero en Occidente ha dolido que India se haya abstenido en la votación del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para condenar la invasión de Ucrania y pedir la retirada.

R: Para nosotros está claro: primero, no tomamos partido. Y además, cuando nosotros hemos tenido problemas con China o Pakistán en el norte [enfrentamientos fronterizos], los europeos siempre nos han dicho que es nuestro problema, que lo resolvamos. Nadie ha tomado partido. Mi primer ministro lo ha dicho muy bien: Europa no cree que los problemas del mundo sean sus problemas, pero sí que sus problemas son los problemas del mundo.

P: Entiendo lo que dice pero, teniendo en cuenta que ustedes tienen esos problemas fronterizos con China, uno esperaría que fueran especialmente sensibles contra las invasiones…

R: No nos gustan las invasiones, pero lo que hemos dejado claro es que nosotros no vamos a condenar a ningún bando. Si hay una invasión, hay que pensar por qué ha ocurrido, para empezar…

P: ¿Por qué cree usted que ha ocurrido?

R: Hay muchas razones geoestratégicas. Es como nosotros con China. La pregunta es: ¿Cómo trabajamos con ellos? ¿Cómo hacemos que se retiren? Seguimos comerciando con ellos, y haciendo negocios. Negociamos y hablamos. Eso es lo que tenemos que hacer. La clave es: ¿Cómo contenemos la situación? ¿Cómo evitamos que escale a un conflicto mayor?

P: Pero ahora estamos en una situación en la que la guerra ha comenzado y las tropas rusas han invadido el país…

R: Y la Unión Europea y Estados Unidos están entregando armas, aunque no están en guerra. ¿Y quién sufre? Los países pobres, como nosotros. Los precios de la alimentación, los fertilizantes o de los combustibles han subido, ha habido disrupciones en el comercio…

P: ¿Hay mucha inflación en India?

R: Está controlada, un 6,5%, gracias a que somos autosuficientes en alimentos.

P: Están importando petróleo ruso.

R: Solíamos comprarles poco, pero ahora les compramos mucho, porque nos hacen un descuento. 

P: Se benefician de la situación.

R: Por la guerra, los precios han subido. Nosotros tenemos una responsabilidad para con nuestra gente. Si podemos conseguir precios más bajos, les compraremos a precios bajos. Es muy simple para mí: esta es una guerra que no creamos, pero de la que sufrimos las consecuencias en forma de altos precios. Si hay un descuento, lo usaré, como hizo la Unión Europea. Si lo tenían tan claro, ¿por qué compraron 800 millones de euros diarios en gas durante la guerra?

Política española

P: ¿Qué es lo que más interesa de la política española en India?

R: América Latina ha girado hacia la izquierda, y algunos países de Europea, de Suecia a Francia o Italia, a la derecha. ¿Qué significa eso para España? Estamos atentos a si la izquierda pierde pie en España, si sube la derecha. Analizamos esas cosas. ¿Va España hacia un período de estabilidad o de inestabilidad política? Recordemos que hubo preocupación por si se iba a poder formar un Gobierno en España. ¿Estamos yendo hacia esa situación otra vez? Tenemos un alto interés económico en España, y sabemos que la política afecta a la economía. 

P: Hay quien se queja de la caída en la calidad de la democracia en India, y del nacionalismo de Narendra Modi.

R: India se ha mantenido como una democracia. Somos el único país de los que obtuvieron su independencia tras la II Guerra Mundial que se ha mantenido todo este tiempo como una democracia, y ello a pesar de la gran diversidad, de los enormes problemas y de ser un continente. Y sí, hay quien se queja de nuestro sistema democrático. Nadie se queja en China. El nacionalismo sube en todas partes. No tiene por qué ser negativo. Sólo lo es si se convierte en algo negativo para otros países, y no hemos hecho nada malo hacia otros países. Somos un país tan diverso que siempre tenemos problemas. Pero nuestros problemas no se transforman en problemas para otros. 

P: Pero ese argumento es el mismo que emplea China.

R: Pero el hecho de que nos mantengamos como una democracia a pesar de todos nuestros problemas da testimonio de la fortaleza de nuestras instituciones. También escucho muchas quejas sobre el peligro de la democracia en Estados Unidos; cuando Giorgia Meloni fue elegida, se dijo que la democracia estaba en peligro en Italia; lo mismo con Le Pen en Francia. Pero la democracia no está en peligro porque suba el nacionalismo, es un signo de democracia. Cuando aparece Vox, eso no significa que la democracia española esté en peligro. En India somos la única democracia del mundo en la que algunos estados están gobernados por partidos oficialmente comunistas.