La vía diplomática para frenar el programa nuclear militar de Irán a través del pacto multilateral que se firmó en 2015 que Donald Trump abandonó en 2018 vuelve a abrirse camino en Washington. Este jueves Anthony Blinken, secretario de Estado de Joe Biden, ha asegurado en una reunión con ministros de Exteriores de Reino Unido, Francia y Alemania que “si Irán regresa al respeto estricto de sus compromisos de acuerdo con el JPOAC Estados Unidos hará lo mismo” y ha asegurado también que Estados Unidos “está preparado para participar en conversaciones con Irán para lograrlo”.

Los esfuerzos por tratar de restaurar la cooperación multilateral han echado andar. Enrique Mora, director político del servicio de acción exterior de la Unión Europea, ha anunciado estar preparado para invitar a todos los participantes del pacto y a EEUU a una reunión informal y desde el Departamento de Estado de Washington se ha confirmado que se aceptaría la invitación.

Pocas horas después de la oferta negociadora de EEUU, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, aseguró que el primer paso que tiene que dar Estados Unidos es levantar "incondicional y eficazmente todas las sanciones". "EEUU levanta todas las sanciones impuestas, reimpuestas o etiquetadas nuevamente por (el anterior presidente Donald) Trump. Luego, nosotros revertiremos inmediatamente todas las medidas correctivas", subrayó en su cuenta oficial de Twitter.

Zarif indicó que es un proceso "simple": "comprometerse, actuar y reunirse", dando a entender que Irán exige medidas claras de Washington antes de volver a entablar conversaciones sobre el acuerdo nuclear de 2015 y regresar a sus compromisos

De producirse, el encuentro podría tener ligar en las próximas semanas y de momento no hay confirmación de si Irán aceptaría participar. Fuentes citadas por 'The New York Times' han explicado que se considera probable que Teherán acepte, aunque también se baraja la posibilidad de que para asegurar esa participación se opte por un formato donde EEUU participe como observador.

Desde el Departamento de Estado altos cargos han confirmado que la mera aceptación de la invitación “no es en sí un avance e incluso la primera reunión puede no serlo” pero, “aun sin querer exagerar”, han destacado que se trata de “un paso”. Y no es el único que ha dado la Administración Biden para reactivar la vía diplomática.

Este jueves también se ha enviado una carta a Naciones Unidas retirando el esfuerzo que inició Trump para tratar de que el Consejo de Seguridad reimpusiera sanciones a Irán. Asimismo, Washington ha anunciado que levanta restricciones de viaje a representantes iraníes para reuniones en la ONU que también había endurecido Trump.

Exigencias a Irán

Tras la reunión telemática de Blinken con sus homólogos francés, Jean-Yves Le Drian; británico, Dominic Raab, y alemán, Heiko Maas, los cuatro responsables solicitaron a la República Islámica respeto a sus compromisos sobre el enriquecimiento de uranio y que no limite las inspecciones internacionales a sus instalaciones atómicas.

Asimismo, advirtieron a Irán que reducir la colaboración con los inspectores del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) sería "peligroso", por lo que reclamaron a ese país que tenga en cuenta el impacto de una medida "tan grave".

Aparte de EEUU e Irán, el acuerdo de 2015 fue suscrito por la Unión Europea, Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania.

Tras la retirada de Washington de ese pacto en 2018 y la reimposición por parte del Gobierno de Trump de todas las sanciones económicas a Teherán, el acuerdo se debilitó.

Irán comenzó un año más tarde a reducir sus compromisos de modo gradual y recientemente, en una clara violación de los límites de ese pacto, empezó a enriquecer uranio a una pureza del 20% y a producir uranio metálico.

La llegada del demócrata Joe Biden a la Casa Blanca, el pasado 20 de enero, hizo confiar en una reducción de las tensiones tras haber expresado durante su campaña su deseo de reintegrar a EEUU al acuerdo siempre y cuando Irán volviera a cumplir sus obligaciones.

El 7 de febrero, Biden afirmó en una entrevista que no iba a levantar las sanciones a Irán a menos que dejara de enriquecer uranio. Ese mismo día, el líder supremo iraní, Alí Jamenei, dijo que Teherán volverá al acuerdo con las potencias occidentales cuando EEUU levante las sanciones.