Las imágenes del asalto al Capitolio han tenido un gran impacto, no solo en Estados Unidos, sino también en el exterior. El presidente electo estadounidense, Joe Biden, se ha dirigido a la nación y ha instado a Donald Trump a dar la cara y a aparecer inmediatamente por televisión para exigir el fin al "asedio" al Congreso, una acción que ha calificado de "insurrección". "Esto no es una protesta, es una insurrección", ha enfatizado.

Biden ha hecho una defensa de la democracia "frente al caos". "América es mejor de lo que estamos viendo ahora. La democracia es frágil y debe ser preservada". El presidente electo ha señalado, además, que la labor de sus mandato será "restaurar la democracia" que "está bajo un ataque sin precedentes".

El vicepresidente de Estados Unidos, el republicano Mike Pence, ha pedido que el asalto al Congreso "termine ya". "La violencia y destrucción que ocurre en el Capitolio debe parar y debe terminar ya", ha expresado en su cuenta de Twitter. "Este ataque a nuestro Congreso no será tolerado y todos los implicados serán perseguidos con toda la fuerza de la ley", ha escrito.

Algunos congresistas han calificado el incidente de "golpe de Estado". "Asistimos a una tentativa de golpe de Estado alentado por el criminal de la Casa Blanca. El intento está condenado al fracaso", ha tuiteado el representante demócrata William Pascrell. "No se trata de una manifestación. Es una tentativa de golpe de Estado", ha insistido la congresista Diana DeGette, al tiempo que ha denunciado "la anarquía fomentada por nuestro propio presidente".

Reacciones desde el exterior

Desde el exterior, el primero en reaccionar ha sido el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, que ha manifestado su estupor por las escenas de violencia vividas en Washington. "Obviamente estamos preocupados y estamos siguiendo la situación minuto a minuto", ha dicho el político canadiense a una emisora de radio de su país. "Creo que las instituciones democráticas estadounidenses son fuertes y espero que todo vuelva a la normalidad en breve".

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por su lado, ha mostrado a través de Twitter también su inquietud por el asalto al Congreso. "Sigo con preocupación las noticias que llegan desde el Capitolio en Washington. Confío en la fortaleza de la democracia de EEUU", ha tuiteado. "La nueva presidencia de Joe Biden superará la etapa de crispación, uniendo al pueblo estadounidense", ha añadido.

El primer ministro británico, Boris Johnson, ha tildado las escenas de " vergonzosas". "Estados Unidos es el defensor de la democracia en el mundo entero y ahora es vital que el traspaso del poder se haga de manera pacífica y ordenada", ha escrito en un tuit. Desde París, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, ha condenado lo que ha calificado de "un atentado grave contra la democracia". "La voluntad del pueblo americano debe ser respetado", ha tuiteado.

El ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, por su lado, ha subrayado que estas imágenes no hacen más que complacer a los enemigos de la democracia. Ha añadido además que "Trump y sus seguidores deberían finalmente aceptar la decisión de los votantes estadounidenses y dejar de pisotear la democracia". El secretario general de la Alianza Atlántica (OTAN), Jens Stoltenberg, ha calificado lo ocurrido en la capital estadounidense de "escenas impactantes" y ha hecho un llamamiento al respeto de los resultados de las elecciones presidenciales celebradas el pasado mes de noviembre.