PROTESTAS SANITARIAS

Moreno no logra el acuerdo con los sindicatos y la huelga de médicos amenaza su campaña

El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, en una de las UCI del recién inaugurado hospital Vigil de Quiñones, en Sevilla.

El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, en una de las UCI del recién inaugurado hospital Vigil de Quiñones, en Sevilla. / EFE

Isabel Morillo

El miércoles 12 de abril los médicos andaluces de la atención primaria están llamados a la huelga por su sindicato mayoritario. La reunión que este lunes convocó la Consejería de Salud para tratar de cerrar un acuerdo y, de nuevo, evitar ‘in extremis’ el paro no tuvo resultados. El Sindicato Médico de Andalucía ya desconvocó sus protestas el pasado mes de enero tras acordar un paquete de mejoras para la atención primaria. Los incumplimientos y la falta de medidas urgentes alimentan las movilizaciones, explican los responsables médicos.

El malestar crece por la orden de tarifas que por primera vez en España abre la posibilidad de conciertos con la privada también para el médico de familia. La primera consulta se cifra en 150 euros, con lo que las aseguradoras cobran hasta siete veces más que un facultativo en la sanidad pública. Hasta ahora las derivaciones a la privada era común en intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas pero no existían para la atención primaria.

CCOO y UGT, que ya mantenían un calendario de protestas, pidieron, dentro del tercer acuerdo de concertación social, rectificar la orden que fija los precios para los conciertos privados. Además en los últimos días han denunciado un “tijeretazo brutal” en las contrataciones del Servicio Andaluz de Salud. A la reunión con Salud también asistió el Sindicato de Enfermería SATSE y el CSIF.

El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, ha ido sorteando la conflictividad por la sanidad pública hasta ahora. Las protestas lejos de embridarse van a más y el asunto amenaza con colarse en el primer plano de la campaña de las elecciones municipales. La oposición ha encontrado en la sanidad un eje para sus ataques al Ejecutivo andaluz. Mientras, el Gobierno minimiza el malestar social. El Centro de Estudios Andaluces (Centra) señaló en su último barómetro que la sanidad y los recortes solo preocupan al 2,9% de los andaluces. El pasado 25 de marzo las mareas blancas en defensa de la sanidad pública sacaron a la calle a unos 50.000 andaluces, según cifras oficiales.

El Gobierno de Moreno desliza que estas protestas son políticas, copiando el mismo mensaje que ha tenido a la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, varios meses contra las cuerdas. Moreno sí que ha dado orden a la consejera de Salud, Catalina García, de negociar y tratar de cerrar acuerdos. Hasta ahora se ha ido consiguiendo, rebajando el estallido cada vez que parecía que la situación era insostenible.

Pactos fallidos

Primero logró un pacto con el Sindicato Médico que garantizaba una agenda limitada a 35 paciente día, 25 para los pediatras, avanzaba en la equiparación salarial, prometía pluses a quien quisiera continuar su jornada una tarde en semana y daba pasos hacia una mayor estabilidad laboral. Desde enero, el Sindicato Médico se desmarcó de las protestas del resto de sindicatos, CCOO, UGT y CSIF, hasta que a finales de marzo se rompió la tregua.

Después, el presidente andaluz logró firmar con CCOO y UGT un tercer acuerdo de concertación social que incluía un apartado específico para la sanidad pública, blindando el 25% del Presupuesto del Servicio Andaluz de Salud (SAS) para la atención primaria, lo que garantiza 3.370 millones de euros. Los sindicatos arrancaron el compromiso de rectificar una segunda vez la polémica orden que fija los precios de conciertos con la privada, excluyendo el uso de las instalaciones públicas sanitarias por parte de las aseguradoras y redactando de nuevo los conciertos para la atención primaria. La orden, que ya fue rectificada una vez para limitar el uso de derivaciones a la privada, tendría que ser modificada de nuevo, según los agentes sociales.

Ocho horas de reunión

La Consejería de Salud se sentó una vez más con los sindicatos este lunes tras la Semana Santa en una jornada intensa que los mantuvo a la mesa mañana y tarde. “Tras más de 8 horas de negociación, se ha completado la presentación de los 18 puntos que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha recogido en un documento de trabajo para la mejora de la Atención Primaria y la atención del paciente en la comunidad autónoma”, comunicó Salud, que defendió las mejoras en presupuesto y contrataciones y emplazó a una nueva cita el 2 de mayo.

Al término, preguntados sobre si había algún acuerdo o avance los sindicatos fueron rotundos: “Ninguno”. Desde UGT, Antonio Macías, consideró que el resultado es el mismo que el del último encuentro: “La administración sigue emperrada en no quitar la posibilidad de privatización de la atención primaria. No entendemos por qué hay que darles tanta vueltas al documento para justificar que solo se haría en caso de emergencia sanitaria cuando lo que tienen que hacer es quitarlo y punto”. Sobre la negociación del acuerdo para la atención primaria, UGT consideró que “sigue muy embarrada” y que hay “diferencias de peso”. Salud emplazó a una nueva reunión el 2 de mayo, aunque los sindicatos reclaman que sean antes. “Nos vemos abocados a continuar las movilizaciones”, señaló el portavoz de UGT.

Desde el Sindicato Médico de Andalucía, el mayoritario entre los facultativos, también lamentaron que no hubiera “avance alguno”. “La huelga sigue adelante”, señalaron. La negociación se está celebrando en una mesa técnica donde se van recogiendo las propuestas de mejora pero sin que se cierre ninguna medida concreta, lamentan.