Ejecutiva del partido

El PSOE hace a Feijóo responsable de la moción de censura de Vox: “Tira la piedra y esconde la mano”

Los socialistas se toman la convocatoria de la ultraderecha con la “máxima seriedad” y rechazan las fórmulas para boicotearla

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero.

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero. / Álex Zea / EP

Juan Ruiz Sierra

El PSOE quiere centrar la moción de censura de Vox contra Pedro Sánchez, que el partido de ultraderecha ha registrado este lunes, en el gran ausente en el debate del Congreso: Alberto Núñez Feijóo. “Se acabaron las caretas, el señor Feijóo intenta lo que hace siempre, bendice el pacto pero se quita de la foto. Tira la piedra y esconde la mano”, ha señalado tras la reunión de la ejecutiva socialista la vicesecretaria general y ministra de Hacienda, María Jesús Montero. 

Los socialistas recuerdan que el presidente del PP ha mantenido contactos tanto con su homólogo en Vox, Santiago Abascal, como con el candidato propuesto para sustituir a Sánchez, Ramón Tamames, para abordar la moción, que está abocada al fracaso y carece por el momento de fecha. Que Feijóo ya ha anunciado que su partido se abstendrá, a diferencia del voto en contra de su antecesor en las filas populares, Pablo Casado, cuando Abascal encabezó la primera moción de censura de la formación ultraderechista en esta legislatura, en octubre de 2020. Que la actitud del líder de la oposición ante esta convocatoria entronca con la que ha mantenido desde que se convirtió en presidente del PP: se “escondió” en la reciente manifestación de Cibeles contra Sánchez, explican en el PSOE, y también evitó asistir a la firma del pacto de gobierno en Castilla y León entre los populares y Vox. Y que todos estos factores, ha concluido Montero desde la sede central de los socialistas, demuestran que Feijóo es un líder “débil” y sin “valentía”. 

La abstención del PP

“¿Qué significa esa abstención? -se ha preguntado la número dos del PSOE-. Significa que a ellos no les importa que haya un Gobierno presidido por la ultraderecha. Porque si no lo quisiera, votaría en contra. ¿Por qué se abstiene, entonces? ¿No quieren molestar a sus socios?”. Montero también ha incidido en que, al no votar en contra de la moción de Vox, Feijóo se comporta de una manera “inaudita” en comparación con otras fuerzas europeas de centro-derecha, partidarias de un “cordón sanitario” a la extrema derecha. 

Los socialistas, por tanto, evitan restarle importancia a la moción de Vox. Primero, por el daño que puede hacer a Feijóo. Pero también por los efectos positivos que tendrá sobre el PSOE, al desplazar momentáneamente del foco sus roces con Unidas Podemos (por la ley del ‘solo sí es sí’ y la guerra de Ucrania, entre otros asuntos) y volver a cimentar el bloque de partidos que hizo posible la investidura de Sánchez. Por eso el socio mayoritario del Gobierno de coalición rechaza la propuesta de ERC de llevar a cabo algún tipo de boicot a Tamames.

“Asumimos la moción con la máxima seriedad y con la atención que merece. La política útil significa tomarse en serio la moción de censura presentada. No hacerle el juego a la antipolítica supone darle seriedad a esta moción”, ha señalado Montero. Los socialistas, en este sentido, aprovecharán la convocatoria de Vox para defender medidas como la subida del salario mínimo, la revalorización de las pensiones o la contrarreforma laboral, mientras subrayan el silencio cómplice y “débil” de Feijóo.