La proposición de ley impulsada por PSOE y Unidas Podemos para impedir que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) haga nombramientos en funciones ha sido aprobada este jueves por el pleno del Congreso, donde la mayoría de grupos ha censurado al PP por el bloqueo al que somete a ese órgano.

El CGPJ lleva ya más de dos años y tres meses en funciones y hace dos semanas se rompió el último intento de cerrar una nueva composición, ante el veto del PP a la candidatura del juez José Ricardo de Prada, que formó parte del tribunal del caso Gürtel y que el Gobierno propone como vocal.

Ambas partes se mantienen firmes en sus posiciones y el acuerdo entre PSOE y PP, necesario ya que los nuevos vocales necesitan un respaldo parlamentario de tres quintos, se aleja aún más ante el horizonte electoral abierto en la Comunidad de Madrid y Murcia.

Varios portavoces lo han puesto de manifiesto en un debate en el que Vox y Ciudadanos han liderado las críticas a los dos partidos mayoritarios por mantener un sistema basado en un "reparto" de vocales para, según han denunciado, intentar controlar políticamente el órgano de gobierno de los jueces.

Competencia esencial de esa institución es nombrar cargos judiciales, desde los magistrados del Supremo a los presidentes de los tribunales superiores de justicia o las audiencias provinciales, y es la que busca suprimir en funciones la proposición de ley aprobada este jueves por 196 votos a favor, 150 en contra y una abstención.

PSOE y Unidas Podemos presentaron esta iniciativa para presionar al PP a sentarse a negociar, pero la estrategia, por el momento, no ha funcionado.

El portavoz socialista, Francisco Aranda, ha recordado que el actual CGPJ ha realizado más de setenta nombramientos en funciones y ha considerar "inexcusable" regular sus funciones, pero su discurso ha estado centrado en el PP, al que ha acusado de ser "poco patriota" y tener una "corta visión política".

"Su posición bloqueadora es injustificable (....) La grandeza también se mide en la oposición", ha advertido a los populares.

Pero el portavoz de este grupo, Luis Santamaría, ha tachado de "chantaje" el recorte de competencias del CGPJ, ha asegurado que su grupo no dejará "caer" al Poder Judicial y ha acusado al PSOE de romper las líneas rojas marcadas en la Transición para preservar la convivencia. "Están más cerca del PSOE del 36 que del PSOE del 1978", ha recalcado.

Muy duro contra el PP ha sido el portavoz de Unidas Podemos, Enrique Santiago, quien ha atribuido a ese partido una conducta "sediciosa", al bloquear una renovación que marca la Constitución cada cinco años, y le ha acusado de "secuestrar" al CGPJ para que garantice su impunidad en los casos de corrupción que afronta.

Santiago, quien ha asegurado que la formación morada no ha planteado candidatos al nuevo CGPJ, ni ha sido consultada, ha considerado antidemocrático que el PP la vete en las negociaciones y ha cargado también contra el Consejo caducado por realizar nombramientos sin "legitimidad democrática".

"Dejen en paz a la justicia", les ha espetado el portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, defensor de que sean los propios jueces quienes elijan a la mayoría de vocales CGPJ.

Lo que quiere Vox, ha explicado, es "bloquearle las manos a los políticos para que dejen de meterlas en la Justicia y desbloquearla a los jueces y magistrados, para que puedan votar en libertad".

Ciudadanos también defiende ese cambio de modelo y su portavoz, Edmundo Bal, ha criticado la reforma planteada por la coalición de gobierno al considerar que supone "una deslealtad al sistema constitucional" y "una traición al principio de equilibrio entre poderes",

También el PNV ha cuestionado la reforma "exprés" impulsada por PSOE y Podemos sin consenso y sin atacar la raíz del problema -la aplicación de "criterios sectarios y partidistas", con cuotas y vetos, en la elección del CGPJ- pero su portavoz, Mikel Legarda, ha recordado que el responsable del bloqueo es el PP, que "instrumentaliza un proceso garantista en elección en beneficio propio y en perjuicio de la institución".

Para Jon Iñarritu, de EH-Bildu, la reforma "se queda corta": si los vocales el CGPJ no dimiten, habría que cesarlos una vez concluido el mandato, ha defendido.