La Guardia Civil de Ceuta ha localizado en la medianoche de este viernes el cadáver de un joven migrante marroquí, de unos 18 años, que había intentado cruzar el Estrecho a nado, según el testimonio de otro compatriota que sí pudo alcanzar la costa ceutí al desistir de la travesía.
Según ha informado a EFE un portavoz del instituto armado, el hallazgo se produjo a raíz de que las patrullas de costa de la Guardia Civil encontraran a una persona a las 23.00 horas caminando por la carretera de Calamocarro.
El joven indicó que había intentado irse a nado a la península con otro compatriota y que no respondía a sus llamadas de auxilio cuando ambos optaron por regresar a tierra.
Los especialistas de los GEAS de la Guardia Civil acudieron al lugar indicado y hallaron el cadáver sobre las rocas de un joven marroquí, el cual llevaba aletas y una pequeña tabla de flotabilidad.
A las 01.00 horas de la madrugada se procedió al levantamiento del cadáver, el cual ha sido trasladado a la sala de autopsias para determinar la causa del fallecimiento, que parece estar relacionada con asfixia por inmersión.
El otro joven indicó que llevaban varios días viviendo en la nave del Tarajal, lugar habilitado por el Gobierno ceutí para los inmigrantes y marroquíes que están en la ciudad, y que su intención era irse a la península.
La Policía Judicial se ha encargado de las diligencias para verificar las identidades tanto del fallecido como de su compatriota y constatar su testimonio de que efectivamente llevaban varios días ya en Ceuta.
