Síguenos en redes sociales:

Hortensia Navarro Bravo, en el centro de educación vial de Córdoba.Manuel Murillo

«La meta es hacer de Córdoba toda una ciudad educadora»

Hortensia Navarro, licenciada en Psicología, lleva más de dos décadas al frente del área de Educación del Ayuntamiento de Córdoba y se jubila justo cuando acabe el presente curso escolar.

¿Qué balance realiza de la etapa educativa que ha desarrollado?

Muy positivo y satisfactorio. Me fui acercando a la educación porque sentía que la prevención de las conductas y el origen de los problemas sociales y psicológicos estaba en ella. Además, hemos recibido reconocimiento por parte de familias, profesorado y alumnado en todos estos años. Siempre hemos estado bien considerados por la comunidad educativa.

¿Con qué sensación va a cerrar todo este periodo laboral?

Pues con cierto grado de frustración, porque se comenzó con mucho ímpetu, el trabajo se consideraba de suma importancia para una ciudadanía integrada y comprometida. Pero, con el tiempo, se ha ido estancando. No hemos retrocedido, pero no hemos avanzado para lograr ciertos objetivos.

¿Se ha sentido sola en esta labor?

No. Llegamos a ser hasta 15 personas en plantilla y siempre hemos ido todos a una. Eso sí, hoy día apenas llegamos a 6, un número escaso para todo lo que hay que hacer. No obstante, el equipo del departamento es extraordinario y, aunque se ha visto reducido en los últimos años, ha cubierto sus funciones apoyándose en las nuevas tecnologías y consiguiendo que no mengüe la programación.

¿Satisfecha con el programa?

Nos hemos volcado con el mismo siempre y ha incluido importantes iniciativas sobre ciudades educadoras, seguridad vial o educación en valores. Hemos ayudado a aumentar la expresión artística, con música en los barrios, y la cultural, con visitas a monumentos. La educación es necesaria para el progreso de la ciudad, tanto desde un punto de vista económico como social. Confío en que se solventen los problemas administrativos y se repongan pronto las plazas en esta área.

¿Le quedan temas pendientes?

Haber crecido más hubiese sido fantástico. Ahora nos hubiese gustado resolver el tema de los porteros, que no está resuelto. Y, en general, deberíamos tener un trabajo más coordinado con el resto de servicios municipales porque la meta es hacer de Córdoba toda una ciudad educadora. Y esto debe ser un proyecto colectivo porque, en el fondo, todo educa.

¿Y de qué está más orgullosa?

Dos factores de los que más me han influido en todo este tiempo para mantener la ilusión, el optimismo y las ganas de trabajar han sido de carácter emocional. Por un lado, los magníficos compañeros del equipo. Por otro, el compromiso de los docentes, que se vuelcan y eso es inspirador.

¿Qué radiografía puede hacer de la educación de antes y de ahora?

Sobre todo, hay una cosa que me preocupa en la actualidad, que es la excesiva burocratización. No sé hasta qué punto eso contribuye realmente a que la educación sea mejor. La educación es acción y creatividad. Creo que tanto papeleo dificulta esa frescura y alegría necesarias en esta actividad, donde debe pesar sobre todo la vocación. Pensamos que tanto control y procedimiento nos da garantías sobre nuestra labor, pero hay que asegurarse de que ese tiempo invertido repercute en el objetivo final de la calidad educativa.

Para acabar, ¿algún sueño?

Que mi departamento crezca y sume más cooperación e implicación con la ciudad. La mejor contribución para que seamos más felices y mejores personas es desde la educación, lugar de construcción personal y del entorno. Y que haya un programa eficaz, fruto de una planificación clara que indique dónde queremos llegar y alimente el deseo de seguir creciendo, avanzando y mejorando.

¡Regístrate y no te pierdas esta noticia!

Ayúdanos a adaptar más el contenido a ti y aprovecha las ventajas de nuestros usuarios registrados.

REGÍSTRATE GRATIS

Si ya estás registrado pincha aquí.