La Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) de Córdoba se centrará, en este curso 2022-2023, en su proyección exterior y en el fomento de la investigación. Así se desprende del acto de inauguración oficial del curso académico que tuvo lugar el pasado jueves en el Teatro Duque de Rivas existente en las propias instalaciones del centro.
La gala de apertura contó con la presencia del delegado de Desarrollo Educativo, José Francisco Viso, con la participación de la actriz Esperanza Guardado -antigua alumna titulada de la ESAD que triunfa en películas y series nacionales- y con una propuesta artística coral que ha implicado a toda la comunidad educativa.
El nuevo curso se inicia con unos números positivos, ya que la escuela se mantiene en unos 150 estudiantes y 40 profesores para sus dos especialidades de Interpretación Textual y de Escenografía.
Proyectos colaborativos
“Somos una escuela de Arte Dramático abierta y actual; muy activa y llena de entusiasmo, y que queremos mostrar toda nuestra creatividad y afán investigador, que es mucho”, ha explicado la directora del centro, Raquel Jurado.
La proyección exterior se va a lograr, sobre todo, a través de varios proyectos colaborativos. Entre ellos, destaca uno donde profesorado y alumnado de ESAD Córdoba trabaja con otras escuelas españolas preparando su participación conjunta en la Cuadrienal de Praga, evento internacional de Escenografía. En ella, el apartado de Iluminación está liderado por el centro cordobés bajo la dirección del profesor Pedro Serrano.
Al tiempo, se presentará el resultado del proyecto junto a ESAD Castilla y León y Casa Árabe, que culminará con el estreno de una pieza escénica creada por alumnado de ambas escuelas en torno a la mística andalusí y castellana.
A ello se suman habituales colaboraciones institucionales, fundamentales para generar proyectos artísticos, además de visibilizar y promocionar el trabajo de alumnado y profesorado. “Valoramos mucho las sinergias producidas por la conexión con la TBA21 (Thyssen Bornemisza Contemporary Art), con participación de nuestros estudiantes en performances, prácticas externas, montajes, etc”, explica Jurado.
El panorama se completa con otras muchas junto a los conservatorios de Música y de Danza -muestra de ello es el musical inspirado en West Side Story estrenado en junio-, con la UCO (en particular con el Grado de Gestión y Patrimonio), administraciones locales y regionales, otras ESAD y un largo etcétera.
Y otra fórmula para aumentar la presencia de la escuela cordobesa fuera de nuestro territorio es la movilidad Erasmus, que se retoma con fuerza tras el estancamiento sufrido durante la pandemia. Esta modalidad es demandada especialmente por el alumnado de 2º y 3º y los destinos para ampliar su formación en escuelas y universidades extranjeras son Italia, Portugal y Francia.
En materia de investigación teatral, sobresale su revista digital ‘AR.es’, que edita material propio y publicará su cuarto número este curso, además de colaborar con la Universidad de Estrasburgo en la publicación de un número específico de la prestigiosa revista ‘Recherches’, con lo que incrementa su alcance internacional.
Pendientes de un doble desarrollo legislativo
La escuela imparte estudios reconocidos como Grado Universitario, incluidos en el nivel 2 del MECES (Marco Español de Cualificaciones para la Educación Superior). Sin embargo, su sensación es que sus estudios son “muy complejos, bastante desconocidos, poco valorados y reconocidos socialmente”. Esperan que ayude a mejorar esa situación dos desarrollos normativos que están pendientes y dependen de la Administración: el Decreto de Especialidades (RD 588/2022), y la publicación de un ROC (Reglamento Orgánico de Centro) propio, que está en borrador y aún en un limbo administrativo del que se prevé que salga pero que avanza muy lentamente.
