Para Carmen Palacios y muchos de sus compañeros, el presente curso es preocupante desde el punto de vista de la inclusión presencial del alumnado de Aulas Específicas dado que no se están dando las condiciones necesarias para su desarrollo. «La inclusión es interacción, aumento de ratio en Aulas Ordinarias y Específicas, es favorecer procesos sociales, emocionales y bidireccionales, pero para que se pueda cumplir ha de ser de manera segura, sin poner en riesgo la salud de las personas, y para ello se necesitarían bajadas de ratios», reclama la docente. A ello suma la falta de profesionales en los equipos de orientación así como de profesorado de PT (pedagogía terapéutica) y AI (Audición y Lenguaje). Para esta tutora, esta situación ha agudizado y dejado aún más al descubierto la vulnerabilidad del alumnado NEAE. «Todo esto ha sido planteado por los profesionales y las familias están luchando fieramente por conseguir una actualización muy necesaria de la normativa NEAE, algo que hay que actualizar ya, en función de la realidad educativa en Educación Especial, alejada de ambigüedades y con recursos suficientes para garantizar una educación inclusiva de calidad», apunta la docente.