Teresa Jiménez acaba de cumplir 18 años y empieza este curso la carrera de Administración de Empresas (ADE) en la UCO. Pero

esta joven inquieta e ilusionada que tengo delante ha cumplido un sueño mayor. Ha obtenido una de las 15 plazas para estudiar el grado superior de Guitarra Flamenca tras superar cinco pruebas y en un mundo de hombres. Su esfuerzo se remonta a los 8 años, cuando hizo su primera prueba para entrar en el conservatorio.

--¿Cuándo empieza tu interés por la música y la guitarra flamenca?

--Pues empiezo a los 8 años en el grado elemental del Conservatorio. Y fue porque la profesora de Música Isabel Martínez, del colegio Salvador Vinuesa, donde yo estudiaba, tenía mucha vocación musical y nos la transmitió a los alumnos, y nos habló de la posibilidad de entrar al conservatorio. Yo fui a un concierto de todos los instrumentos, y el que más me gustó fue el de la guitarra flamenca.

--Y ahora has podido al fin entrar en el Conservatorio Superior. ¿Un largo y duro camino no?

--Sí, porque existen tres grados en los conservatorios: el Elemental, que entran los niños de 8 años, el Profesional, y el Superior, y para entrar a cada grado hay unas pruebas de acceso, que hay que superarlas. E independientemente o no, hay un número de plazas por instrumento. Este año, por ejemplo, había solo 15 plazas para el grado superior de guitarra flamenca. Se han presentado 34 alumnos de toda España, pues solo hay uno en Murcia donde también se imparte, pero el bueno, donde se parte el bacalao, es Córdoba.

--¿Y cómo has podido compaginar los estudios de la ESO y el Bachillerato con las clases en el conservatorio?

--Pues gracias a la coordinación musical en el IES López Neyra, de forma que podía asistir por la mañana al Conservatorio unos días concretos y una o dos tardes, o incluso este año, que ha sido el peor, el más duro, he tenido que ir tres tardes y todas las mañanas con horario de Bachillerato.

--Me dicen que la guitarra flamenca es además un mundo de hombres.

--Sí, para que tengas una referencia, de los 34 alumnos que nos habíamos presentado a las pruebas de acceso a Superior solo había 4 mujeres, de las que hemos entrado dos. Además, solo había una chica de mi edad, el resto son de 20, 30, 40 años... yo la más pequeña.

--¿Ahora vas a seguir estudiando música junto a una carrera universitaria?

--Estoy matriculada en ADE y por las mañanas iré a la facultad y por la tarde al Conservatorio.

--¿Tienes decidido enfocar tu vida profesional hacia la guitarra flamenca?

--No sé, todavía no tengo la madurez suficiente como para decidirlo, pero de momento para mí tiene más peso la guitarra que la carrera universitaria.

-¿Cómo ha sido tu experiencia como estudiante en el Conservatorio?

--Pues he tenido la suerte de que he conectado muy bien con el tutor que he tenido durante 6 años en grado profesional, Luis Víctor Pérez, y gracias a eso puedes avanzar más rápido y no abandonar. De todos los que entramos, yo soy la única en el Superior.