CCOO y UGT reclamarán a la patronal subir salarios a partir del 4,5% y un plus según beneficios

Los sindicatos CCOO y UGT plantearán a la patronal CEOE reabrir las negociaciones para un pacto de salarios y que estos suban, por lo general, un 4,5% durante los dos próximos años. A esta cifra las centrales reivindican añadir un complemento según los beneficios que las compañías de cada sector obtengan, obligando a aquellas sociedades con más beneficios a pagar más a sus empleados y flexibilizando las reivindicaciones salariales en aquellos terrenos donde los volúmenes de negocio vayan peor. Así se lo trasladarán a los empresarios en la próxima reunión que programen las partes, en aras de desencallar el Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), una especie de convenio de convenios que pactan las cúpulas y luego aplican sus negociadores sector a sector y que lleva dos años caducado.

Las centrales reordenan sus propuestas ante el enroque de la patronal y renuncian a vincular las nóminas íntegramente a la evolución de la inflación. En este sentido, CCOO y UGT han consensuado abanderar un aumento salarial del 4,5% para este año, del 4,5% para el 2024 y del 4% en 2025, según ha adelantado 'La Vanguardia' y ha podido confirmar El Periódico, del grupo Prensa Ibérica. Dichos porcentajes base son superiores a los que hasta ahora ha registrado, en términos medios, la negociación colectiva.

Acrecentadas las desigualdades entre sectores, con alzas casi parejas a la inflación en determinados ámbitos industriales y pérdidas de poder adquisitivo sustancialmente más abultadas en el sector servicios. En términos medios, la subida salarial pactada por convenio colectivo en 2022 cerró en el 2,8%, una cifra tres veces menor a la inflación media del año, que fue del 8,4%. Y lo que se saldó con la mayor pérdida de poder adquisitivo desde 1985. 

A estos incrementos las centrales exigirán a la organización presidida por Antonio Garamendi que añada un plus que combine un indicador combinado de beneficios e inflación. Esta idea la lleva abanderando CCOO desde hace semanas, que aboga por elaborar un indicador objetivo -al estilo del IPC o el PIB- y a partir del cual obligar a las compañías a mejorar esos incrementos base del 4,5%.

La central dirigida por Unai Sordo planteó a principios de año que la confección de estos indicadores debería corresponder al Ministerio de Hacienda, a partir de los datos declarados por las empresas en sus declaraciones periódicas del IVA. La CEOE, por el momento, no se ha manifestado de manera explícita sobre el tema y todavía no hay fecha para una próxima reunión con las centrales.

Cuánto reclamarán las centrales complementar ese 4,5% de incremento base en función de los beneficios y del IPC es algo que todavía están acabando de definir, según confirman fuentes sindicales. Así como el peso que en cada sector tendría un indicador u otro, a falta del éxito que tenga la propuesta y el recorrido que quiera darle la CEOE, que hasta ahora se ha mostrado firmemente contraria a cláusulas que automaticen incrementos.