Ganar a ElPozo Murcia es muy difícil. Hacerlo cuando el cuadro charcutero lleva una ventaja de 0-2 en tres minutos es casi una misión imposible. ¿Qué hacer ante una situación así? Seguramente el Córdoba Futsal escogió la mejor opción posible, la más digna y coherente, la que mejor se ajusta a su ideario, la que le define como grupo. Siguió igual. Bajó la vista del marcador y la puso en la cancha, donde se libró una batalla sin cuartel, con intensidad y talento. Los locales no se dejaron llevar por la comodidad de asumir una derrota honorable o una victoria moral. Lo que sucedió les dolió y esa es la mejor muestra de que su proceso de crecimiento continúa. Fue la primera derrota de la temporada en el Palacio de Deportes Vista Alegre, pero la despedida la adornaron los aplausos. Pagaron una factura alta por su lánguido arranque, inapropiado ante un contrario de la altura de ElPozo, y se metieron en un lío del que no pudieron ya salir pese a sus intentos. La guerra continúa.

Una entrada de impacto

La puesta en escena fue tremenda por parte de ElPozo. A los 45 segundos, Matteus golpeó duro. El brasileño honró su oficio con un movimiento perfecto de pívot: recibió, controló, se giró para burlar la marca y chutó para batir a Alfonso Prieto. El 0-1 refrendó el gobierno inicial de los murcianos, que impedían a los locales generar peligro. No lo hicieron ni con la primera ni con la segunda rotación de Josan González. Un paradón de Prieto tras un trallazo de Rafa Santos precedió al 0-2, firmado de nuevo por Matteus con un lanzamiento lejano. Apenas se habían rebasado los tres minutos. El técnico cordobesista pidió tiempo muerto para remendar el roto causado por un adversario implacable.

Miguelín, en una acción del partido entre el Córdoba Futsal y ElPozo Murcia en Vista Alegre. Francisco González

El Córdoba, con Miguelin ejerciendo como líder, se arrancó finalmente en ataque a los nueve minutos con un par de situciones que asustaron a Juanjo. En la primera, Shimizu robó una pelota y su disparo se estrelló en el pecho del meta charcutero, que salía a tapar desesperado. Después lo intentó Saura, pero le salió desviado. Ese arreón en la cancha y el aliento del público llevaron a los blanquiverdes a opositar con fuerza al gol. Ricardo lo rozó, pero ElPozo Murcia lo hizo real. Felipe Valerio, en un remate casi sin ángulo, sorprendió al reaparecido Prieto para agrandar la brecha. El poste de la portería cordobesa tembló tras un zapatazo de Alberto García. Los anfitriones se esforzaban por sostener el ánimo ante el castigo. Pablo Del Moral la tuvo clara tras un robo de Shimizu, pero su disparo lo rechazó Juanjo, que acreditó su talento segundos después al desviar un tiro envenenado de Lucas Perin. El Córdoba coleccionaba méritos sin premio; lo de ElPozo era eficacia pura.

Cuando el argentino Mati Rosa capturó un balón no blocado por Prieto para hacer el 0-4, en Vista Alegre sonó la banda sonora de la heroica. Con el marcador imposible, los locales se dejaron llevar por esa mezcla de entusiasmo y orgullo herido que emociona al público pero convierte el duelo en una peligrosa ruleta rusa. Con los planes rotos, el Córdoba tragó saliva en el tramo final hasta el descanso con una oportunidad más de Gadeia. Los números eran parejos en disparos a puerta y entre los tres palos para ambos equipos, pero el marcador mostraba una abismal desigualdad. Pegada y acierto, la diferencia.

Alberto Saura conduce el balón en el partido entre el Córdoba Futsal y ElPozo Murcia en Vista Alegre. Francisco González

Vuelta a empezar

Saura, a los 20 segundos, puso a prueba a Juanjo. Shimizu también estuvo cerca. Los blanquiverdes retornaron con ganas de morder, buscando la reivindicación. ElPozo se pertrechó, dejándose hacer a la espera de poder salir en las contras. Su renta era sustanciosa y no estaba dispuesto a desgastarse más de la cuenta, pensando en su cita de Copa del martes. El Córdoba lo intentó de todas las maneras posibles.

Ismael López, un talento cordobés cedido por ElPozo, lanzó un balón al palo y enardeció a la hinchada, que quería celebrar el gol que con tanta insistencia buscaban los de Josan González. A poco más de siete minutos, con 0-4 en el tanteador, Miguelín se puso la camiseta de portero-jugador. El técnico pontanés buscaba remedios en la chistera para dañar a los de Diego Giustozzi, que iban a lo suyo en un escenario de riesgo controlado. El internacional balear encendió la mecha marcando a falta de cinco minutos y abanderando una cruzada frente al gigante murciano. La hinchada vibró creyendo en los milagros, porque algunos ya han visto en los últimos tiempos. Saura no acertó a remachar en la línea un centro de Miguelín y el partido concluyó con un marcador amplio, posiblemente excesivo, pero esto es la Primera División y así funcionan las cosas.

Miguelín, como portero-jugador, tras marcar con el Córdoba Futsal ante ElPozo en Vista Alegre. Francisco González

Ficha técnica:

1- Córdoba Futsal Patrimonio de la Humanidad: Alfonso Prieto, Pablo Del Moral, Miguelín, Zequi, Shimizu -equipo inicial-, Alberto Saura, Lucas Perin, Álex Viana, Ricardo, Ismael López, Caio y Cristian Ramos (p)

4- ElPozo Murcia: Juanjo, Darío, Matteus, Felipe Valerio, Rafa Santos -equipo inicial-, Leo Santana, Alberto García, Marcel, Gadeia, Mati Rosa y Navarro (p).

Arbitros: Rodrigo Miguel y Sánchez Molina-Tapiador. Amonestaron con tarjeta amarilla a Saura, del Córdoba Futsal, y a Gadeia, Marcel y Alberto García, por ElPozo Murcia.

Goles: 0-1, min. 1: Matteus. 0-2, min. 3: Matteus. 0-3, min. 10: Felipe Valerio.0-4, min. 15: Mati Rosa. 1-4, min. 35: Miguelín.

Incidencias: Partido correspondiente. la octava jornada del campeonato de Liga de Primera División de fútbol sala, disputado en el Palacio Municipal de Deportes Vista Alegre ante 2.200 espectadores. En los prolegómenos se entregó a Kazuya Shimizu el trofeo al mejor gol de la pasada temporada -el que consiguió ante el Barcelona- por parte de Javier Lozano, presidente de la LNFS. En el descanso salieron a la pista para recibir su homenaje los jugadores del Córdoba CF que se proclamaron campeones de la Liga Genuine de fútbol inclusivo.