No es difícil encontrar manos alzadas cuando ante un auditorio escolar se lanza una pregunta: ¿A quién le gustaría ser futbolista? La respuesta suele ser inmediata y masiva. Se trata de la expresión de un deseo y ahí, claro, se desata la ilusión. ¿Y quién quiere ser árbitro? Ahí la decisión es más consciente y real: es posible convertirse en una pieza vital en el engranaje del fútbol. De hecho, se trata de una vía que permite ver los progresos de un modo constante. Se trata, en cierto modo, de una manera de entender la vida. Así lo reflejaron José Luis Munuera Montero y Antonio Martínez, que militan en la Primera División, en una charla en el IES Trassierra enmarcada en el proyecto Hazte árbitro/a de fútbol.

El programa, que tiene como promotores a la Real Federación Andaluza de Fútbol (RFAF) desde su Comité de Árbitros, a la Junta de Andalucía y al Ayuntamiento de Córdoba, ha arrancado con una serie de reuniones informativas en las que se pretende animar a los alumnos de educación compensatoria a ingresar en un colectivo que garantiza deporte, valores y una vía de integración. Cada uno de los estamentos y centros participantes contará con una persona responsable encargada del programa educativo-deportivo, que se coordinará con el equipo, favorecerá la difusión y realizará la evaluación final del proyecto.

Al acto de presentación acudieron el presidente del Imdeco y concejal de Deportes, Manuel Torrejimeno; la delegada de Juventud, Cintia Bustos; y la delegada territorial de Educación y Deportes de la Junta de Andalucía, Inmaculada Troncoso. También estuvo presente el delegado provincial de árbitros de la RFAF, Pedro Benítez, junto a Munuera y Martínez como árbitros profesionales en activo.

Un testimonio directo

"Cuando entré en el mundo del arbitraje, con 15 años, nunca podía imaginar que iba a llegar a Primera División, pero con esfuerzo y constancia he podido cumplir ese sueño", relató Munuera Montero, jiennense afincado en Córdoba que lleva en Primera desde 2016. El colegiado, con categoría internacional desde 2019, resaltó los valores que fomenta el ejercicio del arbitraje. Inma Troncoso destacó que el árbitro, más allá de velar por el cumplimiento de las reglas del juego, es "un deportista más" y una pieza vital para el desarrollo del fútbol.

Las charlas iniciadas en el centro Trassierra harán escala en los institutos Guadalquivir, San Álvaro, Galileo Galilei, López Neira y La Aduana. Se buscan personas de cualquier género que quieran entrar en el mundo del arbitraje, siguiendo una formación específica a través de los cursos que realiza de forma periódica la RFAF.

Apuesta por el deporte femenino

Entre los objetivos del proyecto destacan, según sus promotores, la apuesta por el deporte femenino y la inclusión del alumnado de compensación educativa, pues "desarrolla competencias sociales y cívicas y la autonomía e iniciativa personal", lo que supone un acercamiento a la vida real, un "aprender para la vida", además de desarrollar valores como el juego limpio, el respeto al contrario, el autocontrol, la disciplina, la responsabilidad, el trabajo en equipo, fomentar conductas saludables y el bienestar emocional", tal y como ha apuntado la delegada Inma Troncoso.

Troncoso ha subrayado la dimensión de nuevos educadores en que se convierte el alumnado participante, pues se crea "una espiral educativa, una verdadera cadena de formación en valores, que desde esta Consejería debemos apoyar, a fin de conseguir, no solo buenos deportistas, sino también, y ante todo, excelentes personas".

Por su parte, el director del IES Trassierra, José Rafael Dueñas, ha agradecido la asistencia, la implicación y la coordinación entre todos los organismos y ha valorado 'Hazte árbitro/a de fútbol y fútbol sala' como una gran herramienta educativa que ayuda a la formación integral del alumnado.