La ronda española ha vivido este jueves cierta tranquilidad aunque solo sea por un día. En una Vuelta donde los esprints no acostumbran a formar parte del guión, que la 12ª etapa finalizara con una llegada masiva resulta cuanto menos sorprendente.

Peter Sagan, que va para gran figura del ciclismo, se ha impuesto en la meta de Pontevedra, en un día en el que la clasificación general no sufre ni cambios ni sobresaltos. El británico Bradley Wiggins mantuvo sin demasiados problemas el jersey rojo de líder.

A partir de este viernes la Vuelta entra en el capítulo de etapas decisivas, con un primer contacto con la montaña en la etapa que finaliza en Ponferrada, aunque el sábado y el domingo son jornadas claves donde la clasificación de la carrera, que anda muy apretada, debe acabar de resolverse, sobre todo el domingo con la etapa reina que finaliza en lo alto del Angliru, considerada como una de las cumbres más complicadas para ascender en bicicleta.