Carlos Domínguez-Nieto y la Orquesta de Córdoba, junto a cuatro solistas vocales, el Coro de Ópera de Córdoba y el Coro Joven de Andalucía, afrontan la obra cumbre del músico alemán.

¿Beethoven en Córdoba? Doscientos años después de sus primeras ejecuciones parciales en vivo, en Viena, se estrena en nuestra ciudad la monumental, abrupta, desafiante Missa Solemnis del genio de Bonn. Empresa inexplicable como creación individual, fuera de toda medida o escala, piedra caída del cielo. La obra recala por fin entre nosotros, y tal es su magnitud artística, tantos los recursos movilizados, tal la importancia artística del acontecimiento, que sólo podría compararse con una visita extraordinaria de alguna cumbre del arte mundial, como pudieran ser Las Meninas o Los Burgueses de Calais.

¿Beethoven en Córdoba? Veamos cómo podría haber sido: Junta, Ayuntamiento, Orquesta y Conservatorio deciden poner en marcha conjuntamente una serie de actividades paralelas por tan insigne ocasión. Dos semanas antes, se despliega un gran retrato del compositor en la fachada del CRV, provocando una imagen insólita que da la vuelta al mundo: Beethoven y la Mezquita de Córdoba, dos mundos solo reunibles aquí. Los ensayos de Orquesta y Coro se hacen abiertos al público, invitando especialmente a familias y colectivos desfavorecidos. Aprovechando las circunstancias y el momento histórico del personaje, se programan conferencias del tipo "Creatividad y discapacidad física", "El futuro del proyecto político de Europa" o "Por una deseable Nueva Ilustración". Alumnos del conservatorio hacen conciertos callejeros con su música de cámara. Si fuéramos aún más atrevidos, se exploraría un maridaje con el flamenco más experimental. A través de redes, se pone en marcha la campaña "Mi Beethoven", donde cualquiera puede contribuir compartiendo su obra favorita del compositor. Todo este esfuerzo para que, por unos días, la Orquesta de Córdoba, y por extensión la melomanía cordobesa, pueda sentirse protagonista principal de la vida cultural de la ciudad, de ya es corazón y motor indispensable para ello.

¿Beethoven en Córdoba? Abandonemos la ficción, veamos finalmente cómo será: el pináculo de la temporada, la piedra de toque del estado de forma de nuestras huestes musicales, la prueba de fuego del proyecto artístico de Carlos Domínguez Nieto. En el calendario, uno más de los innumerables eventos culturales y festivos de la semana. Uno de los que más desafortunadamente desapercibido pasará. 

Por cierto, "mi Beethoven" es la Missa Solemnis.

El concierto Missa Solemnis tendrá lugar en el Gran Teatro, en dos pases, durante los días 21 y 22 de abril, ambos pases a las 20.30 horas.