A lo largo de la última década el proyecto de la Orquesta Joven de Córdoba se ha posicionado como uno de los referentes en formación orquestal para jóvenes músicos a nivel nacional. Por sus filas han pasado varios centenares de músicos, muchos de los cuales ocupan en la actualidad plazas en orquestas profesionales en España y en el extranjero.
Su gran trayectoria se verá reflejada en el concierto de su décimo aniversario el próximo 9 de abril en al Gran Teatro de Córdoba, donde los jóvenes músicos interpretarán el Carmina Burana de Carl Orff junto a los Coros Ziryiab y Averroes de la UCO, la Escolanía Cajasur y los solistas Auxi Belmonte, Javier Povedano y Konstantin Derri, todo ello bajo la dirección de Alejandro Muñoz, quien se despide así del proyecto, cediendo la titularidad al joven director cordobés David Fernández, que ostentará el cargo durante los próximos 3 años.
La Orquesta Joven de Córdoba ha programado 34 encuentros desde su fundación en 2012, 16 de ellos con directores invitados, y ha trabajado con más de 35 solistas, de los cuales 18 han sido jóvenes músicos de la propia plantilla de la orquesta. Han realizado 26 conciertos en Córdoba capital, 29 en la provincia y 5 en otras provincias, estando presente en las programaciones de algunos de los festivales mas importantes de la actualidad.
Música de todos los estilos y periodos
Por sus atriles han pasado más de 80 obras de todos los periodos y estilos musicales, desde obras del barroco hasta estrenos de compositores actuales. Han interpretado El Mesías de Haendel, las grandes sinfonías románticas de Dvorak, Tchaikovsky o Brahms, casi la totalidad de las sinfonías de Beethoven, incluyendo la 9ª, sinfonías clásicas, conciertos con solistas y las principales obras del siglo XX de autores como Stravinsky o Mussorgsky. Un repertorio variado y escogido con criterios pedagógicos, pensado para dotar a los músicos de una experiencia completa y de máxima importancia para su futuro como profesionales.
La Orquesta Joven de Córdoba ha tendido puentes hacia la Orquesta de Córdoba, propiciando colaboraciones pedagógicas que han culminado en varios proyectos conjuntos cumpliendo otro de los principales objetivos de la OJC, servir de nexo entre los estudios en el conservatorio y la vida profesional del músico de orquesta.
Pero no todo ha sido un camino de rosas, ya que Alejandro Muñoz y la directiva de la OJC han tenido que enfrentarse a muchas dificultades a lo largo de estos años. La pandemia, la falta de un circuito musical estable en la ciudad para este tipo de formaciones, la dificultad para encontrar subvenciones y apoyos económicos o la ausencia de infraestructuras han sido difíciles de sobrellevar, pero el proyecto de la Orquesta Joven de Córdoba ha sabido salir adelante y actualmente es una orquesta estable, que realiza una labor que siempre ha sido apoyada por el público y que está empezando a ser reconocida por las instituciones.
