La editorial Mr Momo ha publicado Ventura en Córdoba, el misterio de la joya perdida, un libro de aventuras infantil que tiene como protagonista a un niño, Ventura, que viaja por el mundo conociendo nuevas ciudades y resolviendo misterios. La editorial ha elegido Córdoba como el nuevo destino de este protagonista que tendrá que resolver un misterio al mismo tiempo que conoce los principales monumentos de la cuidad como la Mezquita-Catedral, la Sinagoga o el Palacio Episcopal y algunos de sus personajes históricos como Maimónides, Manolete o Joaquín Cortés.
El autor de la obra, Jorge Molinero, ha explicado hoy en Córdoba que estos libros se han concebido como una especie de mini guía de viajes para niños, que sea capaz de transmitir el deseo de viajar, de conocer la cultura y el mundo de forma amena. Además esta lectura recomendada para niños a partir de 8 años difunde valores universales de solidaridad y amistad y aspectos concretos del país que se visita. El anterior volumen se desarrollaba en la ciudad de Nueva York.
La concejala de Casco Histórico, Marián Aguilar, ha presentado este libro, que se distribuirá además de por las librerías por las 82 sedes del Instituto Cervantes, junto al autor y editor del mismo, Jorge Molinero, y Eulalio Fernández, el responsable de la Cátedra Ciudad Mundo de la Universidad de Córdoba, que ha colaborado en la revisión histórica de la obra. "Para Córdoba es un honor que Ventura se haya detenido en nuestra ciudad", ha dicho Marián Aguilar en representación del Ayuntamiento que ha adquirido 300 ejemplares de la obra y que distribuirá por centros cívicos y bibliotecas con el afán de dar a conocer el patrimonio histórico y cultural entre los niños.
La editorial entendía que Córdoba era una ciudad magnífica como referente de las Ciudades Patrimonio de la Humanidad y que ademas su casco histórico cumplía 25 años desde su declaración como bien protegido.
Para Eulalio Fernández este personaje ficticio puede ser un "instrumento magnífico" para la proyección exterior de nuestro patrimonio desde un punto de vista cultural y educativo, ya que los centros educativos podrán desarrollar con esta especie de "miniguía de la ciudad" estrategias vinculadas con el patrimonio y nuestro pasado histórico-artístico.
