Como un tsunami de emoción, alegría, riesgo y risas, cargado de efectos especiales que llenarán la sala de humo, fuego o nieve se presentó ayer el espectáculo Eoloh! , un montaje de circo contemporáneo de creación netamente española que llegará al Gran Teatro los próximos 15, 16 y 17 de febrero con un total de seis funciones. Manuel Coronado, director artístico del espectáculo, señaló ayer que lo que diferencia a Eoloh! de otros montajes parecidos es que no ha sido importado de fuera, siendo la primera vez que una productora española reúne a un grupo de profesionales que, además, no son artistas específicamente de circo, como Teresa Nieto, la encargada de la coreografía, una bailarina muy premiada de ballet contemporáneo, o Miguel Brayda, un escenógrafo que tampoco había hecho nunca este tipo de trabajo. Según Coronado, este montaje incluye algunos de los mejores números que se puedan encontrar en todo el mundo "porque la intención ha sido crear un abanico donde estén representadas todas las artes y estilos del mundo del circo, excepto los animales".
Y para ello se invoca a Eolo, dios del viento. "Me pareció un dios adecuado para empujar con su soplo el viaje de este espectáculo", continúa Coronado, que añade que "Eolo se desmadra, ya que es muy joven, un poco macarra, incluso" y, aunque "yo pretendía un viento suave, se arma un gran revuelo y acabamos en un tornado tremendo". Desde el comienzo se invita a entrar a un "aeropuerto muy especial" a un público que está continuamente integrado en el espectáculo e interactúa en muchos números, ya que transcurren en el patio de butacas. "Eoloh! acaba levantando de sus asientos a los espectadores", añadió Coronado, que avanzó que el espectáculo tiene dos partes. En la primera se intenta levantar el vuelo del único avión de low cost del que disponen los protagonistas, y mientras se repara "van ocurriendo cosas". En la segunda parte aparece Eolo y trastoca los planes de vuelo, acabando en el espacio sideral y convirtiendo el viaje en un vuelo planetario.
Veintidós artistas de cuatro continentes pondrán en escena todo tipo de números, "buscando lo mejor de cada especialidad, de hecho, hay algún numero que solo se puede ver en Eoloh! porque solo lo hacen esas personas en el mundo", poniendo como ejemplo la barra rusa, "un trabajo espectacular que hacen tres jóvenes", o el realizado por las contorsionistas etíopes, cuatro jóvenes únicas en su especialidad en todo el mundo.
"Creemos que es un momento magnífico en este país para hacer circo porque tiene una serie de valores como el trabajo en equipo, la generosidad, la solidaridad o la aventura de conseguir algo", continuó el director artístico, que aseguró que "eso es lo que queremos transmitir". "Aunque parezca una paradoja, el circo es necesario porque esos valores son imprescindibles para la sociedad". Dedicado a todos los públicos, con unos precios adaptados a la crisis (entre 15 y 30 euros) y con la intención de llegar al corazón y al alma de los espectadores, Eoloh! pretende arrancar la sonrisa y despertar la emoción del público.
Por su parte, el delegado de Cultura del Ayuntamiento, Juan Miguel Moreno Calderón, destacó que, aunque no es habitual que el escenario del Gran Teatro acoja este tipo de espectáculos, este montaje "tan llamativo" va ser "muy interesante", señalando que es importante que en la programación de los teatros haya diversidad, siendo el circo "una manifestación artística que, aunque quizá en su forma clásica esté más en desuso, no deja de tener un gran atractivo".
