El Patronato de Córdoba para la Capitalidad Europea de la Cultura 2016 se ha reunido hoy para ultimar la redacción del dossier y toda la documentación necesaria para la presentación de su proyecto de candidatura oficial al Ministerio de Cultura entre los días 5 y 9 de julio.

El alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña, ha informado a los periodistas de que el objetivo de esta reunión ha sido ultimar la redacción del dossier y toda la documentación que va a conformar la candidatura, así como su defensa y el calendario de trabajo hasta el próximo 14 de junio, fecha en la que el Patronato se reunirá de nuevo para tener una "sesión monográfica" donde se dará el visto bueno a todo el material que se presente.

"Se ha establecido un calendario de trabajo hasta esa fecha para que todo se haga con la antelación y las previsiones necesarias. A partir de ahí, preparemos documentalmente todo lo que va a componer la solicitud con material impreso y audiovisual para presentarla al Ministerio de Cultura durante los días 5 y 9 de julio", ha afirmado Ocaña.

Más tarde, a finales de septiembre, la Comisión Seleccionadora convocará a todas las candidaturas presentadas para mantener con ellas un encuentro y una entrevista personal".

Ocaña, que se ha mostrado animado y orgulloso del trabajo tan "intenso, extenso y de una calidad destacable" desarrollado por el Patronato y las diferentes instituciones de la ciudad, ha explicado que en la reunión de hoy también se ha abordado la liquidación del presupuesto de la candidatura del año 2009 y se han evaluado todas las actividades que se llevan realizando desde diciembre.

Ocaña ha señalado también que se ha incorporado al proyecto final la mascota de Kaikó, más conocida como el Caimán de la Fuensanta, y ha asegurado que es un elemento muy "cordobés, versátil y simpático, que da mucho juego".

La leyenda popular relata que este caimán llegó a Córdoba a través de las aguas del río Guadalquivir y, tras el pánico sembrado entre la población, murió en manos de un discapacitado o un preso, según cada una de las versiones.

Más tarde, fue disecado y situado en un muro del Santuario de Nuestra Señora de la Fuensanta como exvoto y, durante la celebración de las fiestas del barrio, se tiene la costumbre de acudir al templo a ver el cuerpo del animal.