La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, a través de la Dirección de Bienes Culturales, ha iniciado el procedimiento para inscribir de manera colectiva en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz catorce triunfos dedicados a la advocación del San Rafael en Córdoba.

El delegado provincial de Cultura, Joaquín Dobladez, dio a conocer ayer esta inclusión de la que destacó que "es una buena noticia y todos somos conscientes de lo que supone San Rafael en el imaginario colectivo cordobés".

Dobladez especificó que un total de 11 triunfos están diseminados por la capital cordobesa y el resto se reparten por los municipios de Castro del Río, Iznájar y Villafranca. "Afecta, por tanto, a 14 bienes patrimoniales en virtud de su enorme valor artístico, histórico y etnológico. Por ello, la Junta de Andalucía concede a todo el conjunto un nivel especial", explicó el delegado de Cultura.

Estos triunfos comenzaron a erigirse tras una epidemia de peste que asoló la ciudad en 1651 como agradecimiento por el fin de la enfermedad, adquiriendo el icono de significación simbólica: la victoria de la vida, y la representación del custodio y protector de la ciudad. De hecho, muchos cordobeses toman a San Rafael como el patrono de la ciudad, pese a que realmente son San Acisclo y Santa Victoria.

Por ello, el delegado provincial de Cultura, Joaquín Dobladez comentó que la ubicación de estos bienes "no es fruto del azar. Están en las puertas de la ciudad, porque se consideraba que así las protegía". Tales son los casos de los triunfos situados en la Puerta de Plasencia, Puerta Nueva, Puerta del Puente (obra de Miguel Verdiguier), la antigua estación de ferrocarril y el Puente de San Rafael (obra de Amadeo Ruiz Olmos, de 1953), que destaca por aportar un toque de modernidad a la clásica representación del arcángel, por la simplificación de volúmenes y rostro.

Asimismo, completan el conjunto de triunfos los ubicados en la plaza del Potro (también de Verdiguier) , plaza de Aguayos, San Basilio, La Compañía y los de Castro del Río, Iznájar y Villafranca. Estos últimos datan en su mayoría del siglo XVIII, cuando se implanta y extiende la devoción al arcángel como custodio tanto de Córdoba capital como de varios pueblos.

Cabe destacar, la efigie de San Rafael en el Puente Romano, de 1651, obra de Bernabé Gómez del Río, como precursora del triunfo, siendo el primer monumento que se erige a San Rafael y, por lo tanto, el más antiguo.