Atractiva como algunas sedas orientales y amarga como el perfume que las amapolas dejan en nuestros dedos". Así define Myriam Mézi¨res su primera película como directora, Flores de sangre, rodada a medias con Alain Tanner, el director con el que se inició en 1976 con Jonás , que cumplirá 25 años en el 2000. En Flores de sangre , que se estrena el viernes, Mézi¨res ha elaborado el guión inspirándose en algunos episodios de su infancia. La película es, como dijo Mézi¨res ayer en Madrid, "la tercera parte de un tríptico" que comenzó con Una llama en mi corazón (1986), también de Tanner, en la que participó en la escritura del guión. En El diario de Lady M. (1992), Tanner dirigió, pero el guión lo firmó íntegramente Mézi¨res. En Flores de sangre la actriz se responsabiliza del guión y asume parte de la dirección.
Tanner y Mézi¨res comparten ideas parecidas sobre el cine, aunque los gustos de ambos en un primer momento fueran diferentes. A Tanner le gustaba el neorrealismo italiano y ella veía películas populares de la India, "que no olvidan las secuencias de canto y baile". Tanner se ha ocupado de la unidad de la película y ella ha incorporado su forma lúdica de entender el cine. En Flores de sangre se cuenta la historia de una bailarina de estriptís, que sobrevive como puede en bares de mala muerte hasta que un día pierde la custodia de su hija y con ello el poco equilibrio que le quedaba a su vida. "Yo fui una niña que no pisó una escuela hasta los nueve años. Si tuviera que identificarme con alguno de los dos personajes sería con la hija, aunque no puedo separar a las dos porque son flores distintas con la misma sangre".
La nueva directora afirmó que no siente complejos por no haberse formado en una escuela o no haber rodado previamente un cortometraje. "La cámara es la conciencia, y ninguna escuela te enseña cómo tener conciencia". Tanner supo desde el primer momento que ésta iba a ser la película de Myriam Mézi¨res y le ayudó a rodarla "con la autenticidad que necesitaba una película de carácter frágil".
Flores de sangre es una coproducción entre Suiza, Francia y España (Messidor Films). Mézi¨res ha trabajo en España en teatro y en cine (Boca a boca , de Manuel Gómez Pereira, y Agujetas en el alma , de Fernando Merinero). Flores de sangre se ha rodado en París y, en parte, en L´Alcúdia, "donde se celebra el único festival agroerótico del mundo".
EL LADO OPTIMISTA
La idea de la actriz y directora no era "hacer un psicodrama, que --agregó-- sólo me hubiera interesado a mí y a mi psicoterapeuta". Mézi¨res señaló que "toda película es un viaje" y que en esta ocasión se trataba de mostrar "cómo los seres diferentes son machacados por la sociedad", pero también ofrecer el lado optimista según el cual "todo el mundo es recuperable".
La película queda, en palabras de la directora, "abierta a la interpretación del público, que puede crear su propia historia con toda libertad". Mézi¨res es de las que creen "en el ser humano y en que no hay que ejercer ningún tipo de manipulación sobre él". Dijo también que habla de la mujer no desde un plano social, sino desde "un punto de vista irracional, interior y poético". Su propósito, concluyó, es ofrecer "como una mística de la mujer".
