Sentencia

Absuelven de una denuncia de su expareja al hombre de Jauja apoyado por sus vecinos

La denunciante acudió a un bar donde se encontraba el varón y este tuvo que marcharse tras sufrir un ataque de ansiedad | Se enfrenta a múltiples denuncias de la mujer

Concentración frente a las puertas de los juzgados de Lucena.

Concentración frente a las puertas de los juzgados de Lucena. / M. González

Manuel Á. Larrea

Manuel Á. Larrea

La concentración causó repercusión. Jauja se movilizó para apoyar a uno de sus vecinos, que se enfrenta a múltiples denuncias de su expareja por quebrantamiento de una orden de alejamiento. Pero lo más sorprendente es que esa movilización fue convocada por la asociación de mujeres Xaumil. Hoy, el Juzgado de lo Penal número 6 de Córdoba, absuelve a este hombre de una de las últimas denuncias.

El juicio tuvo lugar el pasado 24 de febrero por una denuncia de su expareja. En esta ocasión, el hombre se encontraba en un bar de Jauja desde el mediodía y, a media tarde, su exmujer llegó al establecimiento.

Cabe recordar que el varón se trasladó definitivamente desde Lucena, donde sigue residiendo su ex, a esta aldea cercana. Aún así, por azares, según ella, que afirmó que se dirigía a otro municipio a ver a su nueva pareja y pasó por el bar con la hija menor de ambos, llegó al lugar donde se encontraba él. Fue entonces cuando sucedieron hechos totalmente distintos, según cada versión, pero que acabaron con el denunciado -ya absuelto- marchándose a su casa.

La versión de la acusación hablaba de pánico y humillación por la reacción del hombre al verla. Sin embargo, el acusado explicó que fue ella la que se dirigió a él y le pidió que se marchara sin mediar más palabras. Al ver a la pequeña, la defensa relata que sufrió un episodio de ansiedad que le obligó a quedarse unos minutos allí sentado y atendido por varios conocidos.

Testigos en el bar

Tres testigos presentes en el bar fueron llamados a declarar. Esas declaraciones apoyan la versión del acusado y refuerzan afirmaciones como que sufrió un ataque de ansiedad. "Con nada que la vio venir, intentó irse", aseguró una estas personas.

El juzgado considera probado que el varón "quiso abandonar el local" y la denunciante "se mantuvo en la puerta, impidiendo así el paso" de este, "a quien le dio un ataque de ansiedad". Cuando ella entró, el denunciado "finalmente se marcha", recoge la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico.