Una comisión técnica y política culminará la disolución de la empresa municipal de Vivienda de Lucena (Suvilusa) y su consiguiente integración en el Ayuntamiento. Los grupos municipales han acordado, definitivamente, su extinción. Asimismo, el alcalde de Lucena, Juan Pérez, reconoció ayer que, «a medio plazo», el Consistorio renuncia a construir inmuebles de protección oficial, «el principal escollo» que en las últimas semanas ha paralizado un proceso examinado desde hace años. Un plazo que «no sería descartable», confirmó Pérez, para consumar la liquidación de esta sociedad municipal coincidiría con la finalización de este ejercicio, es decir, a fecha de 31 de diciembre de 2022. La sincronía del cierre económico con la absorción de las funciones, derechos y obligaciones, por parte de la Administración local, conllevaría notables facilidades financieras.
Al objeto de agilizar esta compleja misión, las formaciones políticas pretenden incluir por vía de urgencia, en la sesión plenaria de esta noche, la constitución del órgano que pilotará la disolución de esta empresa pública, constituida en 1994, y que gestiona pisos sociales, tanto del Ayuntamiento como de la Junta, en régimen de arrendamiento simple y de alquiler con opción a compra, así como aparcamientos.
La confección y aprobación de una memoria técnica, jurídica, económica y social sustentará, legalmente, la conclusión de la actividad de Suvilusa. La plantilla, actualmente integrada por tres trabajadores, pertenecerá, en igualdad de condiciones laborales, a la nómina de empleados del Ayuntamiento. Es más, el compromiso del equipo de gobierno, exigido reiteradamente por IU, adelanta esta equiparación al comienzo de este año.
El Ayuntamiento, directamente, asumirá en este año la compra de 11 viviendas, vía licitación pública, y su rehabilitación para incrementar el parque público de inmuebles. El montante asciende a 450.000 euros. En adelante, el área de Vivienda, encajada en Servicios Sociales, replicará este método en la voluntad de aumentar el número de viviendas reservadas a las familias con recursos limitados. El alcalde puntualizó que «en los próximos años» el Ayuntamiento «sí podrá acometer» la promoción de viviendas, una opción, por ahora, marginada. Por lo tanto, Suvilusa, cuya extinción habían pactado PSOE e IU en el último acuerdo presupuestario, prolonga una propensión de unificación de funciones que supuso la extinción del PDM, Servimán, AGIL o la Gerencia de Urbanismo.
