La Policía Nacional ha detenido a siete personas como presuntos miembros de una organización dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación laboral y que operaba en fincas agrícolas de las provincias de Sevilla y Córdoba.

Las investigaciones se remontan al mes de junio cuando la Policía detectó a un hombre de nacionalidad nicaragüense que operaba en las inmediaciones de un bar situado en la barriada sevillana de la Macarena captando a extranjeros para ofrecerles trabajo como jornaleros en fincas de la provincia de Sevilla desde el mes de abril a junio. Según ha informado la Policía, realizaban jornadas de más de doce horas sin descanso y con un salario que dependía de la productividad, oscilando entre 30 y 40 euros diarios.

Los agentes localizaron a otra persona de origen rumano que se encargaba de negociar los contratos de recolección con los dueños de las fincas.

Los jornaleros no eran dados de alta en la Seguridad Social ya que carecían del permiso de residencia y de trabajo en España y se les proporcionaba verbalmente un número de NIF de otra persona para que se identificaran ante los propietarios cuando iban a trabajar.

Tras meses de investigación la Policía consiguió identificar a nueve personas que formaban parte de una organización criminal y que se habían repartido las tareas de captación, transporte, control y vigilancia de los trabajadores.

El pasado 1 de diciembre se estableció un dispositivo en una finca situada en Córdoba en la cual se tenía conocimiento que estaban trabajando los investigados y en la inspección se localizaron a 23 personas de nacionalidad sudamericana trabajando y se intervinieron más de cuatro mil euros en efectivo y diversa documentación.

En la operación fueron detenidas siete personas por un delito contra los derechos de los trabajadores, falsedad documental, pertenencia a organización criminal y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.