El Consorcio de Bomberos de Córdoba es uno de los organismos dependientes de la Diputación que mayor controversia viene planteando durante los últimos años, pues sus responsables se han enfrentado a numerosas protestas de los trabajadores que reclamaban el cumplimiento de una serie de compromisos por los gestores del organismo. Entre ellos, el más complicado de encauzar ha sido el de la promoción a la categoría C-1 de los bomberos, pero también el deterioro de los parques, el mal estado de los vehículos o la falta de epis, entre otros asuntos. El presidente del consorcio, Rafael Llamas, señala que todo ello se está abordando, pero con los recursos de que se dispone y las limitaciones burocráticas y administrativas existentes no se puede ir al ritmo que sería deseable. Llamas apunta, además, que el esfuerzo económico que se está haciendo es muy importante, pues para los próximos presupuestos del organismo se prevén 18,6 millones de euros, lo que supone un 3,42% más que el año pasado y un 24% si se compara con el año 2015, cuando sumaba 15 millones. El año 2022 se espera empezar a ver el principio de las soluciones de alguna de las demandas de los sindicatos.

La última protesta sindical tuvo lugar el miércoles 17 de noviembre, coincidiendo con el pleno ordinario de la Diputación. A las puertas del salón de plenos los representantes sindicales volvían a reclamar el cumplimiento de «los acuerdos adoptados en materia de personal y de dotación de materiales para la mejora del servicio». Entre las demandas de los bomberos, según explica el presidente de la junta de personal, Antonio Mellado, está la del incremento de la plantilla, pues, según apunta, al principio de la legislatura se acordó incorporar 12 nuevos bomberos por año, por lo que al final del mandato serían 48. De ello, indica, solo se ha cumplido el primer ejercicio, pero no el segundo. Este incremento es necesario porque, según indica Mellado, hay parques con tres personas por turno, lo que en ocasiones, ante un suceso de envergadura, les hace requerir ayudas de otros parques.

En lo que se refiere a la promoción a C-1, este pasado viernes se ha celebrado la última reunión entre plantilla y empresa para poner en marcha el proceso de concurso oposición para 120 plazas, una vez que el área de Recursos Humanos ha elaborado un informe en el que hace constar que es viable el procedimiento propuesto. Por ello se espera que en estos próximos meses se ponga en marcha la maquinaria. El compromiso del presidente de la entidad es seguir con sucesivas convocatorias hasta cubrir las expectativas de los trabajadores. A este ámbito de personal hay que añadir la pendiente regularización de las plazas que están cubiertas por personal interino, además de la creación y dotación de personal para el centro de coordinación de llamadas.

Sobre personal, Rafael Llamas apunta que se ha pasado de un presupuesto de 12,1 millones del año 2015 a los 14,4 del 2021 y que la cantidad presentada para el 2022 es de 16,01 millones, un 11% más que la del 2020. Además, Llamas indica que de 212 efectivos se va a pasar a 281, lo que supone, según el también alcalde de Montilla, un 32% más. De ellos, añade, 257 serán bomberos operativos, una vez que la propuesta se apruebe en la inminente junta general de la entidad.

Para el sostenimiento del consorcio, los municipios mayores de 20.000 habitantes aportan cada uno entre 483.281 euros y 983.730 euros anuales, siendo Lucena el que más asigna. La suma total de las cuotas de estos municipios asciende a 3,7 millones.

La renovación de la flota, fundamental

Respecto a la inversión en la flota, los sindicatos se quejan de contar en los distintos parques con vehículos antiguos y reclaman la renovación de los mismos. Explica Antonio Mellado que se han adquirido coches para mandos, que en algunos casos no existen, por lo que los vehículos no se están usando, mientras que algunos de los camiones tienen más de 20 años. Al respecto, Rafael Llamas indica que la inversión prevista para este año es de 1.022.333 euros, a la que hay que sumar más de cinco millones que se incorporarán como remanentes para la adquisición de unos 20 vehículos, lo que es posible «por la no aplicación de las reglas fiscales en el presente ejercicio desde el Gobierno de España». La inversión en vehículos nuevos, concluye el presidente del consorcio, «estará entre cinco y seis millones».

Llamas explica que las inversiones más importantes que se están haciendo actualmente se refieren a transmisiones y telecomunicaciones, donde se han dedicado 598.000 euros (en dos pagos) para cambiar todos los equipos del consorcio, tanto móviles como fijos (repetidores, 120 transmisores, 20 equipos atex, 40 cajas remotas para instalar en la parte trasera de los camiones bomba, 260 craneales, entre otros).

En cuanto al soporte del sistema de gestión informatizada, Llamas señala que la inversión total asciende a 360.000 euros «para el montaje de la sala de operaciones y la instalación en los vehículos de una tablet para facilitar información en ruta referente al suceso en el que se va a actuar». Además, añade, «se ha licitado, por 20.000 euros, un programa de inventario y almacenaje dotado de 40 tablets, tres para cada parque».

Por último, Llamas recuerda las inversiones acometidas en mejoras en distintos parques, como el de Palma, donde entre mobiliario y obra se han destinado 250.000 euros. Entre La Carlota, Pozoblanco y Peñarroya, la inversión es de 120.000 euros y en Montoro, 900.000 euros. «A todo esto hay que sumar las efectuadas en material y vestuario», apunta el presidente del consorcio.

Por otro lado, Unespa aporta 1,2 millones que deben ser utilizados para mejoras en la seguridad de los trabajadores.