El escritor e historiador Fernando Penco, autor del libro La foto de Capa, ha localizado una instantánea atribuida a Robert Capa realizada en la localidad de Castro del Río. El hallazgo es de suma importancia porque ubica al fotógrafo y a la también fotógrafa Gerda Taro en Castro del Río, a muy escasos kilómetros de Espejo, donde se realizó la famosa foto Muerte de un miliciano.

La instantánea se tomó a orillas del Guadajoz, a los pies del Puente Nuevo, donde el fotógrafo húngaro retrató a Gerda Taro junto a tres milicianas pulcramente ataviadas que sonreían a la cámara. Era a comienzos de septiembre de 1936 y quedaba poco tiempo para que, a escasos kilómetros de allí, en la vecina Espejo, surgiese Muerte de un milician, la fotografía más icónica de la Guerra Civil Española y con la que nace el fotoperiodismo de guerra.

Según matiza Fernando Penco, quien ha contado con la ayuda del investigador local Juan Cívico, el estudio podría estar indicando que ambos fotógrafos acompañaron a Franz Borkenau en el viaje que el escritor vienés realizó a Castro del Río el 6 de septiembre de 1936, por lo que el historiador no descarta que la famosa foto se hubiese hecho la tarde del 6 de septiembre de 1936 y no la del 5, como hasta ahora se pensaba.

La instantánea, tomada a orillas del Guadajoz, responde al título en original de Gerda Taro y otras tres mujeres y es de 21,3 x 31,1 cm. En la actualidad, se halla en los fondos del ICP (Museo de Robert Capa en Nueva York) con el número de registro es el nº 2010.86.631 y, en los datos que acompañan a la foto aparecen la fecha (agosto/septiembre de 1936) y el lugar en el que se tomó (Córdoba). Esta información llevó a Penco hasta Castro del Río, donde pudo localizar un paisaje en el que, aparte del Guadajoz y del Puente Nuevo, aparecen el cerro de San Cristóbal y el camino del Cortijo de los Charcos.

Al ser preguntado por otra reciente foto aparecida en el libro La utopía campesina en Castro, cuyos autores también han ubicado en esa localidad, Penco señala que es una foto muy parecida a otra que la Agencia Magnum atribuye a David Seymour: "De ser cierto, que podría serlo, estaría confirmando que Seymour acompañó a Gerda Taro y a Robert Capa hasta Espejo, lo que abre nuevas expectativas sobre Muerte de un miliciano", concluyó el historiador.