LA ACTUACIÓN HA CONTADO CON UN PRESUPUESTO CERCANO A LOS 265.000 EUROS

Concluye la obra de consolidación de la casa de Teresa Enríquez en Montilla

El edificio, del siglo XVI, se sitúa en el entorno de protección de Santa Clara y del palacio

Concluye la obra de consolidación de la casa de Teresa Enríquez en Montilla

Concluye la obra de consolidación de la casa de Teresa Enríquez en Montilla

Juan Pablo Bellido

Juan Pablo Bellido

El alcalde de Montilla, Rafael Llamas, firmó ayer el acta de recepción de las obras de consolidación de la casa de Teresa Enríquez, un inmueble del siglo XVI anexo al Palacio de los duques de Medinaceli y al convento de Santa Clara.

El proyecto, que ha sido ejecutado por la empresa montillana Construcciones Antroju, ha contado con un presupuesto cercano a los 265.000 euros y se ha centrado en la consolidación de cubiertas, envolventes y estructuras portantes para garantizar la estabilidad del edificio.

«En una fase posterior se adaptará el inmueble para su uso definitivo», recalcó el alcalde, quien aseguró que la recuperación de este edificio «era un compromiso de toda la Corporación dentro de la apuesta y defensa de nuestro patrimonio y, también, como elemento de nuestra propia identidad como ciudad patrimonial».

La intervención se ha centrado en la consolidación estructural del edificio «para garantizar la conservación del inmueble» ante los «graves problemas constructivos que presentaba». Para ello, se ha instalado una nueva cubierta de madera y se ha reemplazado el forjado intermedio, a la vez que se ha reforzado la fachada y otros elementos que presentaban un mal estado de conservación.

«La idea de futuro es hacer del Llano de Palacio uno de los espacios culturales y patrimoniales más importantes de Montilla», destacó Rafael Llamas, quien aludió al reciente convenio con el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) para recuperar el Molino del Duque como futuro espacio museístico dedicado al aceite.

De igual modo, el primer edil se refirió a la futura recuperación del Palacio Ducal de Medinaceli y la «puesta en valor» de algunos espacios del convento de Santa Clara, tras el convenio con el propio Consistorio que hará posible la cesión de una parte del cenobio para su uso sociocultural.

La casa de Teresa Enríquez está en el entorno de protección del convento de Santa Clara, declarado monumento histórico-artístico nacional y Bien de Interés Cultural (BIC). «La Ley de Patrimonio establece que este tipo de monumentos cuentan con un entorno de protección que alcanza los 50 metros en suelo urbano y los 200 metros en suelo urbanizable y no urbanizable, por lo que el inmueble está incluido en el entorno de protección de Santa Clara», aclaró Rafael Llamas.

La vivienda cuenta con dos plantas sobre una parcela de 494 metros. Se organiza con un cuerpo principal de dos crujías paralelas a la fachada, datado en el siglo XVIII, y un patio trasero con el cuerpo de escalera, de comienzos del siglo XX. El edificio cuenta con una estructura de muros de carga de mampostería y tapial.

Por la disposición del tejado y los huecos existentes, el inmueble contó en su origen con una fachada al este, donde se alza actualmente un edificio de viviendas que se levantó sobre el solar de las desaparecidas Bodegas Ortiz Ruiz.

La casa, sin uso desde hace décadas, presentaba un mal estado de conservación. De hecho, el inmueble ha perdido gran parte de su solería y de sus carpinterías interiores. En una dependencia junto al convento de Santa Clara, el Ayuntamiento ubicó hace años un Punto de Información Turística que permanece cerrado.