El presidente y la vicepresidenta segunda de la Diputación, Antonio Ruiz y Ana Carrillo, respectivamente, presentaron ayer ante la sociedad cordobesa el que será plan fundamental de actuación de la institución provincial durante este mandato, el denominado Plan Impulso, con el que está previsto invertir 200 millones de euros en cuatro años. Este plan es además el que marcará el norte de las líneas presupuestarias de la institución provincial. Según explicó a este periódico Antonio Ruiz, el objetivo es «imprimir un mayor desarrollo de nuestro territorio en materia de empleo, competitividad, modernización y bienestar social» y para ello «pretende contar con la participación de todos los agentes sociales, económicos, administrativos y de participación de la provincia».

Esta estrategia, que se ha diseñado utilizando como base el Plan Estratégico redactado en el 2011, se sustenta en cuatro pilares fundamentales. Dichas grandes áreas se definen como Compromiso por Córdoba, acuerdo de concertación social firmado ya con sindicatos y patronal y dotado en principio con 240.000 euros, tendente a promover el empleo y el emprendimiento; Córdoba social, que acometerá políticas y actuaciones destinadas a los colectivos menos favorecidos, así como los programas de intervención social que se articulan desde el Instituto Provincial de Bienestar Social; Córdoba Destino, que lo que busca es hacer de la provincia un destino más competitivo en materia turística, con la vista puesta en la desestacionalización, aprovechando la excelencia y variedad del producto con que se cuenta. En este mismo bloque se incluye Córdoba es Cultura, que pretende hacer lo propio con las potencialidades culturales que ofrece la provincia, con la intención de convertirla en un elemento dinamizador de la economía; y, por último, Córdoba Participativa, centrada en articular todos los medios disponibles para hacer oír la voz de la ciudadanía en las decisiones que se tomen. Una de las iniciativas puestas en marcha para ello ya ha sido el Consejo de Alcaldes, según apuntó Ana Carrillo, y como herramienta fundamental habló Ruiz de las redes sociales y las posibilidades que presentan en cuanto a comunicación con la ciudadanía y transparencia de las instituciones. El presidente de la Diputación señaló que a mitad del mandato se habrán invertido ya unos 127 millones de los 200 previstos para todo el plan, lo que supondrá un 63%.

Ruiz dijo que «la falta de inversión pública de los últimos años nos obligó a poner en marcha un plan inversor de choque que, en lo que llevamos de mandato, ha permitido poner sobre la mesa cerca de 86 millones de euros». A ello, añadió, se suman 41 millones de inversión previstos para 2017 y «ya reflejados en el presupuesto ya aprobado». Así, indicó, «esta apuesta inversora ha sido capaz de duplicar las partidas de los Planes Provinciales, habilitar un nuevo programa de reposición y mejora de caminos, con 3 millones entre 2016 y 2017, y dedicar 15 millones a reposición y mejora de carreteras».

Antonio Ruiz explicaba que lo novedoso que presenta este Plan Impulso es que exige el «esfuerzo, la colaboración y la implicación de todas las administraciones en aquello que nos une, que es el desarrollo de la provincia, y el bienestar de todos los cordobeses y cordobesas». Indicaba el presidente de la Diputación que “hoy en día, la ciudadanía exige estas actitudes de colaboración en aquellos temas que son beneficiosos para la provincia, como el turismo, las políticas sociales, el desarrollo económico, que ya lo hemos demostrado recuperando ese diálogo social de forma conjunta con CECO y los sindicatos UGT y CCOO, y nos lo tenemos que autoexigir si queremos que cuestiones tan importantes como el tren de cercanías de Palma del Río a Villa del Río o el centro de logística para Córdoba en toda su provincia sean una realidad». Añade el también alcalde de Rute que «por desgracia, en la actualidad lo que se destaca son las diferencias y hoy lo que queremos poner sobre la mesa es lo que nos une».

Por su parte, Ana Carrillo insistió en señalar que «el plan es un conjunto de actuaciones, propuestas, medidas y acciones que pretende impulsar la actividad económica y el empleo, atender las necesidades sociales de la familia y los colectivos más vulnerables, aprovechar las potencialidades de nuestra cultura y recursos turísticos e implicar a la ciudadanía en los procesos de participación y toma de decisiones».