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CABRA LAS PRIMERAS CONCLUSIONES SE CONOCERAN EN PRIMAVERA

Un grupo de arqueólogos analiza la pintura rupestre de la Venus

La figura muestra la relevancia

que la Prehistoria tuvo en el municipio.

Un grupo de arqueólogos analiza la pintura rupestre de la Venus

Para principios de la primavera del año 2007 se tendrán las conclusiones de la actividad puntual arqueológica que, a lo largo de este fin de semana, realiza un equipo multidisciplinar dirigido por Juan Carlos Vera, profesor de Prehistoria de la Universidad de Huelva, en la Cueva de la Ermita del Calvario de Cabra.

Se trata de un estudio científico que tiene como objetivo poner en el mapa mundial del conocimiento prehistórico la pintura rupestre de la ya conocida como Venus Egabrense. Las primeras dataciones la sitúan en un periodo de unos 12.000 a 14.000 años, al final del Paleolítico Superior. Concretamente, en el periodo magdaleniense.

El hallazgo se produjo en el año 1988 y fue casual, ya que se encontró al derrumbarse una cantera caliza entonces en explotación. Esta circunstacia permitió descubrir una pintura --que podrían ser dos, por la presencia de unos trazos que apuntan a la existencia de una segunda figura-- que se encuentra en muy buen estado de conservación.

La Venus tiene una figura femenina estilizada y muy alargada que, como explicaba Rafael Maura, director del conjunto arqueológico de los Dólmenes de Antequera y miembro del departamento de Prehistoria y Arqueología de la UNED, es de color negro y realizada probablemente con carboncillo. La pintura muestra lo que a priori parece la representación de la cabeza, la cintura, que es muy alargada y llega hasta la nalga, y acaba en la parte inferior con una pierna en forma apuntada.

Las características de esta Venus se repiten mucho en las representaciones femeninas del Paleolítico. Sin embargo, en Andalucía, hasta ahora sólo se ha encontrado en la Cueva de Ardales, que dirije y conserva Pedro Cantalejo.

En el resto de la península sólo se han hallado este tipo de pinturas en la cordillera cantábrica. Y en Europa, en algunos puntos de Francia y Centroeuropa. Para el profesor Vera, esto induce a pensar que estas civilizaciones se situaban entre la malagueña Ardales y el municipio de Cabra, "en la punta del iceberg de unas representaciones de estas sociedades del paleolítico que hasta ahora han sido escasamente conocidas".

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