El Corpus Christi vuelve a brillar en Córdoba

El patio de los Naranjos y las calles de Córdoba, bañadas de romero han esperado la salida de la Custodia de Arfe a su salida en la procesión del Corpus Christi que este año ha vuelto a brillar “como no lo hacía desde hace años”, como comentaban los fieles. Flores en las calles, altares y alegría en las caras de los niños vestidos de comunión han acompañado al cortejo en la salida de la custodia de Arfe por la Puerta del Perdón de la Mezquita Catedral.

En torno a las 20.00, tras la bendición del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, en la eucaristía celebrada en la Mezquita Catedral, la Custodia, precedida por el misterio de la hermandad sacramental de la Sagrada Cena, ha salido del Patio de los Naranjos acompañada de un largo cortejo que avanzaba rápidamente por las calles del centro, en su vuelta al recorrido tradicional.

El trayecto empezó en el interior de la Mezquita Catedral desde donde los fieles, entre los que se encontraban, además de los niños, representantes de Hermandades y movimientos parroquiales, han acompañado a Jesús Sacramentado a las calles de la ciudad.

Tras la salida del Patio de Los Naranjos, el Corpus Christi ha recorrido las calles Cardenal Herrero, Magistral González Francés, Cardenal González, San Fernando, Diario de Córdoba, Claudio Marcelo, plaza de Las Tendillas, Jesús y María, Ángel de Saavedra, Blanco Belmonte, Conde y Luque, Deanes, Judería y Cardenal Herrero, para volver de vuelta a a la Catedral de Córdoba.

Sobre la media noche, está previsto que monseñor Demetrio Fernández, al acabar el recorrido dé la bendición a los fieles. Al cortejo este año se unió, además, el misterio de la hermandad sacramental de la Sagrada Cena que precedía a la custodia de Arfe acompañada de la banda de música Tubamirum de Cañete de las Torres.

Otra de las novedades de este año es que por primera vez una banda de música, concretamente la de María Santísima de la Esperanza, ha arropado a Jesús Sacramentado.

Once altares

Durante la procesión un total de 11 altares repartidos durante todo el recorrido han engalanado las calles para alegrar a la procesión a su paso, tres de ellos en los alrededores de la Mezquita Catedral instalados por la Agrupación de Hermandades y Cofradías de la mano de la Hermandad de Ánimas, el Amor y Pasión. Varios coros de hermandades como la Misericordia han actuado en sus altares mientras pasaba el cortejo.

Si algo ha destacado el público durante el trayecto es la dimensión del cortejo procesional y el acompañamiento al mismo. Las calles han lucido con bulla en todo momento, disfrutando de uno de los días festivos más grandes para los devotos y de las agradables temperaturas primaverales que invitaban a salir de casa.