día mundial de las personas desaparecidas sin causa aparente

El Ayuntamiento recuerda a las personas desaparecidas que ascienden a 168 casos en la provincia

Las familias piden seguir dando visibilidad hasta que aparezcan

Familiares de personas desparecidas, a las puertas del Ayuntamiento de Córdoba.

Familiares de personas desparecidas, a las puertas del Ayuntamiento de Córdoba. / ÓSCAR BARRIONUEVO

Europa Press

El Ayuntamiento de Córdoba ha aprobado este jueves en el pleno una declaración institucional sobre la celebración en esta jornada del Día Mundial de las Personas Desaparecidas sin causa aparente, motivo por el que parte de los familiares de dichas personas, junto a personal de la Asociación Provincial de voluntarios de Protección Civil y Emergencias, se han concentrado en las puertas del Consistorio, donde han desplegado una pancarta y han recordado que son unos 168 casos, "algunos con más de 20 años".

En este sentido, el padre de Paco Molina, el joven desaparecido desde el 2 de julio de 2015, como portavoz de la Asociación de Familias y Amigos de Personas Desparecidas de Córdoba (Afadecor) y representante de la Fundación QSDglobal, ha valorado el apoyo desde el Consistorio y ha lamentado que por el momento no hay novedades sobre los casos abiertos en la provincia, "que son de larga duración".

Así, ha mencionado a Francisco Bonilla, de 68 años que desapareció en Cabra la tarde del 13 de abril de 2015; a Ángeles Zurera, que desapareció en Aguilar de la Frontera el día 2 de marzo de 2008; a Rafael Muriel, vecino de Adamuz desaparecido desde el 1 de septiembre de 2016 con 57 años, y a su hijo, Paco Molina, con 16 años.

Según ha subrayado Isidro Molina, "hasta que aparezcan hay que seguir dando visibilidad, porque esto es un drama que le puede tocar a cualquier familia", a la vez que ha defendido contar con "cuerpos especializados en desapariciones en las Fuerzas de Seguridad del Estado, porque son muy pocos los especialistas", de ahí que haya hecho un llamamiento a tener "medios suficientes, tanto personales, como técnicos, a nivel provincial".

También, ha elogiado que se impulse el primer plan estratégico sobre personas desaparecidas, que se aprobó en 2022, aunque "va muy lento para las familias", al tiempo que ha respaldado que haya un estatuto de las personas desaparecidas, "porque no existe ninguna ley que proteja", ha comentado.

El alcalde, José María Bellido, junto a familiares de personas desaparecidas.

El alcalde, José María Bellido, junto a familiares de personas desaparecidas. / ÓSCAR BARRIONUEVO

Mientras, el hermano de Rafael Muriel, Juan, ha explicado que Rafael fue "dos veces" para que lo ingresaran en el Hospital de Los Morales de la capital cordobesa, en cuyo entorno se perdió su rastro, después de llevar diez días sin la medicación con la que se trataba su esquizofrenia, pero "se negaron a ingresarlo", de modo que "se pudo haber iniciado algún procedimiento judicial", pero lo dejaron "creyendo que iba a aparecer".

Así lleva siete años, en espera de saber algo sobre su paradero, un tiempo en el que han buscado "por todos lados, por la sierra de Adamuz y la zona del Brillante en la capital, donde están Los Morales, pero nada", ha explicado Juan Muriel, quien ha lamentado que "en el caso no hay pistas" que ayuden. El hijo de Juan era intermediario en la investigación, "pero cogió depresión y se suicidó en el año 2021", y su mujer "no ha podido soportarlo, cayó enferma y hace un mes murió", ha relatado, para apostillar que su mujer ha muerto "de pena".

20.000 denuncias en 2022

En concreto, en la declaración, impulsada desde la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), se recoge que un año más el informe del Centro Nacional de Desaparecidos hace consciente de "la magnitud social de este fenómeno, que evidencian las 20.000 denuncias registradas durante 2022 en España".

Al respecto, se expone que "las causas han sido muy diversas: desde la violencia de género, los problemas de salud mental, el alzhéimer, hasta los conflictos intrafamiliares", y ante ello "la consecuencia siempre ha sido la de un impacto emocional arrasador para los familiares, más doloroso cuanto más extendido en el tiempo".

Además, destacan del último año la aprobación por el Gobierno del primer plan estratégico en materia de desapariciones, que, "también por vez primera, incluye una dotación económica y un ambicioso programa de formación y de sensibilización", a la vez que se reivindica el papel del Consistorio "como la institución más cercana a los ciudadanos enfrentados a la dramática experiencia de haber perdido el rastro de un ser querido sin causa conocida, con desconocimiento de su paradero y de los riesgos para su integridad", siendo "el espacio natural desde el que convocar la movilización ciudadana y el apoyo en el acompañamiento a las familias de desaparecidos".